Ciudad Victoria, Tamaulipas. – El caso del empresario originario de Reynosa, Sergio Carmona Ángulo, asesinado el pasado 23 de noviembre en San Pedro Garza García, Nuevo León, aturdió la política tamaulipeca por señalamientos de presuntos financiamientos de campañas políticas y favores a candidatos de Movimiento de Regeneración Nacional, pero fue ignorado por el delegado de Morena en Tamaulipas, Ernesto Palacios Cordero.

Y es que este fin de semana se reunieron los cuatro precandidatos por el Consejo Nacional de Morena, para ser el abanderado del partido para la elección de gobernador en el 2022, junto al resto de los 34 aspirantes para estrechar lazos de unidad, ignorando lo que no se puede ignorar.

Al ser cuestionado sobre el caso, el delegado respondió de tajo;

“Morena no tiene nada qué decir al respecto, nosotros decimos que aclare quién tiene que aclarar”, sin ahondar más en el tema.

A los Carmona se les vincula con el senador y abierto aspirante a la candidatura el senador Américo Villarreal Anaya, quien no acudió al llamado del CEN para cerrar filar con sus compañeros para evitar el divisionismo.

También se acusa de vínculos con el diputado presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Erasmo González Robledo, otro de los aspirantes que no asistió a la reunión en la capital, al igual que el responsable de la Promoción y Defensa del Voto de Morena en Tamaulipas, José Ramón Gómez Leal.

Un tema que ha generado ruido al interior del partido, tanto fuera de él por sus vínculos con el empresario señalado de delitos en materia de hidrocarburos, fue ignorado en la reunión donde estuvieron presentes la mayoría de los aspirantes a gobernador de Tamaulipas, lo que trae a la memoria la frase metafórica: “Un elefante en la habitación”.