Consciente que en la actualidad existen alcaldes que han sido reconocidos por buenas acciones en sus administraciones y esto tomando en cuenta las reales observaciones positivas fruto del trabajo y no los “auto reconocimientos” o laureles inventados y/o pagados para promocionarse sin fundamentación real.

Vivimos en tiempos que no es raro ver que se utilicen mecanismos para alzar la imagen de “x” político, desde publicaciones periodísticas a su favor, comentarios de apoyo vía las diversas plataformas de redes sociales, videos promocionales, reconocimientos inventados, hasta doctorados “Honoris causa”.

Es un hecho que tanto recursos económicos, así como favores personales o políticos se utilizan para estos propósitos, pero de vez en cuando vemos que genuinamente existen casos meritorios para resaltar. En esta ocasión haré una póstuma pero más que merecida mención de un caso de un reconocimiento inédito que se le llegó a otorgar a un ex alcalde tamaulipeco, del cual nunca se supo.

Fue en la administración 2011-2013 de Victoria Tamaulipas, encabezada por el C.P. Miguel Ángel González Salum, un organismo nacional, tras haber hecho un análisis sobre el desempeño de administraciones públicas municipales, concluyeron otorgarle un reconocimiento por eficiencia administrativa al alcalde capitalino.

Dicho reconocimiento estaba pactado para que se le entregase en evento trascendente en la ciudad de México. Hasta ese momento al menos, nunca había sabido de un caso similar. (Hasta la fecha creo tampoco)

¿Por qué nunca se supo de ello y menos lo utilizó González Salum para vanagloriarse?

Porqué fue el mismo quien decidió no solo no acudir para recibirlo, sino solicitó no se publicitara y le encargó a su secretario particular en su momento, que pudiese contactarse con los organizadores y se disculpara de su parte. El reconocimiento se lo terminaron haciendo llegar y nunca se mencionó.

Por una parte, esto se debió a la manera muy reservada de ser en estos casos del ex alcalde, en verdad a quienes nos tocó vivirlo en esa administración así cómo quienes lo conocemos, sabemos sobre su humildad y postura de no alardear. Pero eso es solo una parte, para ser justos habría que contar el contexto completo.

En ese entonces el gobernador de Tamaulipas era Egidio Torre Cantú, quién había llegado a ese puesto tras el trágico asesinato de su hermano, el siempre bien recordado Rodolfo Torre Cantú. Sabemos ahora que muchos fueron los pactos que se rompieron y los acuerdos políticos que nunca se concretaron tras el brutal suceso.

Muy comprensible en una parte y con gran desconfianza y rencor entró a gobernar el Ing. Egidio Torre Cantú. Si de por si su carácter siempre fue serio y esto dicho por personas que lo conocieron desde joven, después de las versiones que circulaban sobre los implicados o al menos el conocimiento que se tenía o tuvieron sobre aquella matanza por parte de personajes del mismo sistema gobernante.

González Salum se había ganado la oportunidad de la candidatura tras su paso como Diputado federal, que también un dato que pocos saben, logró cabildear y bajar millones de pesos de la federación para Tamaulipas, tras su buen trabajo en comisiones y como legislador. Así que después de esa encomienda, le tocó empezar su trienio tras ganar la elección con Egidio Torre como gobernante estatal.

Torre Cantú fue duro con muchos y con él no fue la excepción, no fueron pocas las muestras de no civilidad y hasta en ocasiones de desprecio de su parte. (Fui testigo de algunas de ellas por eso con seguridad lo digo) No le gustaba que figurara el alcalde y su gente y menos siendo de la administración capitalina.

El ex gobernador habrá tenido sus razones para su comportamiento, pero en el caso en mención en verdad era totalmente injustificado. Supe por personajes políticos de aquella época que era más porque Miguel González fue impulsado en el periodo de Eugenio Hernández, no era tanto por algo personal, sino por su coraje en contra de Eugenio y su grupo político o al menos la mayoría.

Es más Rodolfo se llevaba muy bien con Miguel, me tocó estar en una cena privada donde fui testigo de ello. Pero esa fue la razón principal por la cual González Salum, no quiso ir a México para ser homenajeado y nunca lo mencionó ante los medios.

Una administración no exenta de errores y críticas, pero con méritos palpables para haber sido distinguida, o en el caso de él, con tal galardón. Pagó gran parte de la deuda que se le había hasta infamemente heredado (recordando el caso de los 50 millones de empréstito de último momento de la administración anterior (ADG)

Cumplió con pagos pendientes de proveedores que no eran de su periodo, bajó montos de pagos a funcionarios, ajustó el gasto público con responsabilidad, tipo lo que ahora se le conoce como (PbR) Presupuesto Basado en Resultados, comenzó un programa con mayor amplitud en pavimentaciones con cemento hidráulico, entre otras relevantes acciones.

Como miembro que fui de aquella administración, de mi parte contribuí con establecer récord en generación de empleos que hasta la fecha prevalece, mayor derrama económica y nuevos programas establecidos, hasta con reconocimiento por parte del (CIDE) Centro de Investigación y Docencia Económica, organismos empresariales y hasta universidades de E.U., desde mi trinchera de Desarrollo Económico.

Y algo extra por mencionar, yo ganaba como titular del área menos de la mitad de lo que le pagaban a mi antecesor de la administración de Diez Gutiérrez y por las circunstancias no alcancé mucho presupuesto, pero eso nunca lo tomé como excusa y menos como impedimento.

Y habrá que recordar que, por la cuestión política, tránsito y seguridad pública municipal fue manejada por el estado, entonces no se contaba con esa entrada de recursos, sin mencionar que en esa época fue cuando hasta granadas se tiraban. Fue un periodo nada fácil, pero es por eso mismo que se realza lo logrado.

En lo personal puedo decir que ha sido una de las épocas más satisfactorias de mi vida laboral, se trabajó con mucho respeto, ahínco, profesionalismo y responsabilidad. Una vez le comenté (MGS) que sentía que había que promocionar más los logros obtenidos porque nos había costado mucho esfuerzo, y él tranquilamente me comentó:

“Yo sé que tienes razón en tu visión de las cosas Jorge, y sí, quizá sería justo el hacerlo, pero al final del día que sea el gusto de haber cumplido con las encomiendas lo que nos de la satisfacción personal y profesional, lo demás, que el tiempo lo diga”

Su congruencia y elocuencia solo superada por su caballerosidad.

Hoy veo y me congratulo de todos aquellos que con el mismo ahínco trabajan y merecido tienen su reconocimiento. Hay hombres y mujeres muy productivos y por ello llaman la atención, por el bien de Tamaulipas y de nuestro país que ese sea el parámetro evaluativo y competitivo.

Aquellos que siguen esmerándose por figurar sin elementos que los respalden, pues nunca es tarde para recomponer el camino, la gente ya no es tonta, todavía puede ser quizá engañada o manipulada por conveniencia o perversidad, pero ya no maniatada. Pagar encuestas a modo o comentarios favorables solo alimenta el ego, pero no arregla los problemas reales.

Culminando como dijo el siempre apreciado Migue, que sea el tiempo que lo diga.

Me acordé de la anécdota y conociéndolo a él, sé que nunca contaría lo del reconocimiento, por eso lo hago yo en esta colaboración. Por otro lado, es de bien nacidos ser agradecidos y desde aquí envió un especial saludo para mi amigo el Contador Miguel González Salum, aprovechando la ocasión para felicitarle por su cumpleaños.

Hablando de reconocimientos que sobresalen

Hace unas semanas en la ciudad de México se le otorgó a un Tamaulipeco la distinción de ser nombrado como nuevo Presidente Nacional de Líderes Juaristas A.C., una asociación civil que desde hace años enarbola ideales liberales y progresistas. En el antiguo Senado de la república le tomaron protesta al Lic. Alberto Betancourt Ortiz, ante un foro de miembros e invitados especiales de varias partes del país.

En un evento festivo y de concordia, Betancourt llamó a la unidad e incitó que había que ser agentes de un verdadero cambio nacional, alentó el seguir promoviendo liderazgos sociales a través del bien hacer y del trabajo duro. Mensaje que le reconocieron todos los presentes. Su experiencia laboral y política sale a relucir en tiempos complejos en nuestra nación.  

En hora buena por el Lic. Betancourt Ortiz, conociéndolo, sé que comenzando a organizarse, dará mucho de qué hablar y la asociación será un referente social. Habrá que estar atentos.

Reflexión Final

"Los hombres no son nada, los principios lo son todo"

-Benito Juárez García-

Jorge Alonso Infante Alarcón  

Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.

Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)