La vida ha cambiado. Y no solo en lo superficial, sino en lo más profundo de sus ciclos.

Antes, un padre vivía con la certeza de que cuando los años le pesaran, serían sus hijos quienes estarían ahí para cuidarlo, acompañarlo, verlo envejecer y finalmente despedirlo con dignidad. Hoy, esa certeza se ha evaporado. Muchos hijos se han ido, física o emocionalmente, y no regresan. El futuro ya no los incluye. Y esos padres, antes fuertes, hoy cansados, enfrentan solos la vejez… o peor aún: reciben a los mismos hijos, ya adultos, buscándolos solo cuando sus propias vidas colapsan económicamente.

El ciclo natural —ese que dictaba que los hijos despedían a los padres— también se ha roto. Cada vez es más frecuente ver a madres y padres sepultando a sus hijos. Por enfermedad, por violencia, por accidentes, por desesperanza. La inversión del ciclo duele en el alma y deja heridas que no cierran.

Pero no son los únicos cambios. Antes, el trabajo era una etapa que culminaba en el retiro; hoy, se prolonga más allá de los 60 o 70 años, porque la pensión no alcanza o porque simplemente no hay quien cuide de uno. Antes, el hogar era el refugio familiar; hoy, muchos adultos mayores viven en casas vacías, sin ruido, sin visitas, sin nietos. Y en lugar de compartir el pan con los suyos, lo parten solos.

Antes, la comunidad cuidaba, el barrio vigilaba, la familia era escudo. Hoy, el aislamiento es una epidemia silenciosa que devora lentamente a quienes menos deberían enfrentarlo: los viejos.

La vida ha cambiado. Y aunque eso no siempre es negativo, hay transformaciones que duelen, que descolocan, que exigen repensarnos.

¿Quién cuidará de nosotros cuando ya no podamos?

¿Quién despedirá nuestra historia cuando llegue el final?

Tal vez la pregunta más urgente no sea quién… sino cómo nos estamos preparando para cuando ese momento llegue.

Marco Esquivel

Valle Hermoso, Tamaulipas 1973
Periodista, Agente de Seguros y Consultor Político

Tiene una maestría en Gobierno y Política Pública; un Máster en Gestión de Riesgos y un Máster en Consultoría Política. Es director general del periódico digital HOYTamaulipas.

Como agente de Seguros, en 2024 obtuvo la designación como Máster en Seguros Personales, concluyendo su carrera con el Diplomado en Finanzas Personales y Familiares en el ITAM; cuenta con cédula para intermediar seguros personales, empresariales y agrícola y ganado, en 2025 otuvo su cédula para intermediar Fianzas. Es miembro de la Million Dollar Round Table (MDRT) que congrega a los mejores agentes de seguros internacionalmente.