La situación de Correcaminos en lo deportivo no pasa por su mejor momento, la muestra está en sus resultados y los números negativos que en los últimos partidos han dado, una vez más ilusionó a la poca, pero fiel afición que asiste al estadio al hilvanar tres victorias consecutivas, sin embargo, todo mundo imaginaba que el equipo encontraría su mejor versión y que de ahí en adelante las cosas serían distintas, pero no fue así.

Todo lo contrario, el equipo cayó en un bache más grande que los que provocan las lluvias, al sumar su tercera derrota consecutiva, que podría dejarlos fuera de toda posibilidad ya no digamos de liguilla, si no de repechaje.

En los últimos años el amor a la camiseta por parte de jugadores que vienen a pasearse se ha perdido, ya no existe ese cariño y ese respeto a los colores, a la institución, tal vez sea porque solo vienen por 6 meses o lo que dure su préstamo, y se van, en la mayoría de los casos.

En una ocasión tuve el gusto de platicar con el director general del equipo, y le comentaba que Correcaminos en Ciudad Victoria representa mucho, si el equipo anda bien o mal siempre será tema de conversación en los almuerzos o reuniones y le mencionaba que la identidad que se tenía se ha ido perdiendo poco a poco, y que mucho tenía que ver la falta de jugadores locales, esos que van a sentir el amor por el equipo y que probablemente lo defenderán hasta con las uñas y dientes.

Lo que se vio anoche en el terreno de juego daba tristeza, pocos son los jugadores que se salvan, entre ellos pudiera ser “Chimpa” Amador, Giovani Hernández, Jorge Sánchez, Iván Pineda y Alexis Andrade, y párele de contar, porque dedos le van a sobrar.

Anoche una parte de la afición se metió con Daniel Amador, abucheando cada que tocaba la pelota, a mi parecer un poco injusto porque ha sido de los jugadores más regulares dentro del equipo, otro de los que fue fuertemente abucheado fue el director deportivo Juan Carlos “Puchi” Arellano hasta gritos de “¡FUERA!, ¡FUERA!” se alcanzaron a escuchar en reiteradas ocasiones.

Tanta es la molestia de la afición ante los malos resultados, que anoche al finalizar el encuentro un sector de aficionados ingresó al vestidor de los jugadores a reclamarles y exigirles que hagan un buen papel, me comentan que no pasó a mayores pero la charla estuvo fuerte.

Otro detalle a resaltar es el tema del cociente, al finalizar el torneo Correcaminos tendrá que desembolsar una fuerte suma de dinero por terminar en los últimos lugares, debido a los malos torneos que ha tenido en el último año futbolístico, si algo les duele a los empresarios y directivos del fútbol es el bolsillo, esperemos que el director general, David Martínez ponga mano dura dentro de la institución y quien tenga que irse del plantel que se vaya por el bien de la institución.

Fabián Meléndez

Reportero gráfico.

Ha colaborado en diversos proyectos periodísticos. Además como fotógrafo profesional ha participado en campañas electorales, deportivas y de gobierno.