Matamoros, Tamaulipas. -  El sacerdote Francisco Gallardo López, encargado de la Pastoral Social de la Diócesis de Matamoros aseguró que la atención que la Iglesia brinda seguirá a la comunidad que llega desplazada o como migrante, inclusive se ampliará con la apertura de una nueva Casa del Migrante.

Destacó que la preocupación es que los migrantes tengan miedo de acudir al Centro Integrador para Migrantes (CIM), debido a la distancia y la seguridad, sin embargo, se ha entablado un diálogo con las autoridades encargadas para tratar de orientarlos en que es una buena opción de refugio, pues lo que se busca es evitar que retornen los campamentos improvisados y en precarias condiciones, como los que se registraron en el 2019. 

“Esto para nosotros es nuevo, pero considero que es importante, y ojalá que funcione, ojalá que los migrantes quieran estar en este lugar porque por lo que hemos visto se les brindará toda la ayuda para evitar que de alguna manera se vuelvan a presentar los campamentos, que ahí viven en una situación muy precaria y estos lugares les brindarán más seguridad”, dijo. 

“Hemos tenido diálogos con quienes coordinan este centro, pues hasta ahorita hemos caminado solos como sociedad civil, pero ahora con este centro ayudará mucho, sin embargo, estaremos trabajando igual con nuestras casas, incluso vamos a habilitar otra casa para la atención de los migrantes”, agregó.

Resaltó que esta nueva casa que se estará habilitando a la brevedad, será habilitada en el Albergue San Juan, buscando que sea un lugar más céntrico, más cerca de la Central de Autobuses en donde se tendrá una capacidad para recibir a 200 personas.