Chilpancingo, Guerrero. - Las dirigencias de los partidos políticos que integran la alianza PRI-PRD a la gubernatura, acusaron a los órganos electorales de un acto de barbaridad, y de poner en riesgo la elección del pasado domingo, el haber declarado una tendencia sin contar con la mayoría de las actas computadas.

Pero además, con un Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) inoperable, el cual dejó de contabilizar después del mediodía del lunes, con el apenas el 37 por ciento de las actas computadas, lo que genera sospechas de una elección manipulada.

En conferencia de prensa, los líderes Héctor Apreza Patrón y Alberto Catalán Bastida, del PRI y PRD, respectivamente, informaron que no aceptan el resultado del conteo rápido emitido por el Instituto Nacional Electoral (INE), durante la noche del domingo, y mucho menos que haya una tendencia a favor de alguno de los candidatos a la gubernatura.

El líder del PRI, Apreza Patrón denunció que de manera inexplicable, el PREP no proyectó los resultados de las casillas donde el candidato de la alianza PRI-PRD, Mario Moreno Arcos obtuvo el mayor porcentaje de votos, con lo que refleja una elección manipulada, y con nula confiabilidad.

La alianza, dijo, aceptará los resultados, cuando se haya concluido con el cien por ciento de las actas, y en el caso de hallarse inconsistencias, se recurrirá a los tribunales, como un recurso legal, para hacer respetar la voluntad ciudadana.

Agregó que la elección del pasado domingo no contó con los principios de certeza, legalidad, transparencia, máxima publicidad e independencia, «hoy nos encontramos con dos órganos electorales que le han fallado al pueblo de Guerrero».

Por su parte el dirigente del PRD, Alberto Catalán Bastida, calificó como increíbles las excusas del IEPC, al referir problemas de conexión del servicio de internet y de servicio de energía eléctrica para la emisión del cómputo, con ello, dijo, «echaron a la basura los 35 millones de pesos que costó la operación del PREP».