Ciudad Victoria, Tamaulipas. – La extensión de la emergencia sanitaria por el Covid-19 hasta el 31 de agosto, mantiene inquietos a los boleros de Ciudad Victoria ante la abrupta baja de clientes y merma en sus ingresos para poder asegurar el sustento familiar.

Por esa situación atraviesa Raúl Macías, representante de los 45 lustradores de calzado distribuidos en las principales plazas de la capital, de los que asegura solo diez se encuentran laborando.

"La situación es cada vez más difícil, los gastos en la casa no paran y al día estamos haciendo tres o cinco boleadas -de 20 pesos-. Es muy desesperante con esto del coronavirus", aseguró.

Dijo que el periodo vacacional que inició la burocracia estatal y municipal complicará aún más la situación de los boleros, al disminuir el número de transeúntes por las próximas dos semanas.

"Vamos a tener que pedir prestado, empeñar o trabajar en otra cosa para poder llevar algo a la mesa, ojalá y pronto termine la pandemia para volver a trabajar normal", puntualizó.

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