Ciudad Victoria, Tamaulipas.-El consumo de sal y azúcar es necesario para el buen funcionamiento del organismo, ya que la primera es útil en el mantenimiento de la presión de la sangre y los fluidos extracelulares, y el segundo proporciona la energía que el organismo necesita para trabajar adecuadamente.

Sin embargo, advirtieron médicos del Seguro Social en Tamaulipas, el ingerir en exceso estos nutrimentos puede traer diversas complicaciones al corazón, los riñones y la microcirculación, además de estar ligados a padecimientos crónico - degenerativos.

La doctora Iris Elizama Requena Lara, Directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N.° 67 del IMSS en ciudad Victoria, explicó que un consumo saludable de sal es aproximadamente de cinco gramos al día, mientras que de azúcar, la porción ideal varía de acuerdo con la condición y estado de salud de cada persona, aunque es común que la población se exceda en el consumo de la misma.

Abundó que el exceso de sal en la alimentación puede ocasionar retención de líquidos, lo que incide en aumento de peso, lo que obliga al hígado, los riñones y el corazón a trabajar por encima de sus niveles normales, “además, tiene repercusiones importantes en el sistema cardiovascular, ya que el consumo desmedido de sodio eleva la presión arterial y ocasiona enfermedades renales, hepáticas e insuficiencia cardiaca”.

La doctora Requena Lara detalló que el consumo excesivo de azúcar puede ocasionar enfermedades degenerativas como hipertensión y diabetes, padecimientos que además se registran a edades cada vez más tempranas, “ingerir grandes cantidades de azúcar de forma prolongada da como resultado altos niveles de glucemias, condición que al mantenerse por mucho tiempo, puede causar daños en riñón, corazón y ojos, entre otros órganos”.

Para prevenir éstos y otros padecimientos, la doctora del Seguro Social recomendó a la derechohabiencia acudir a los módulos de Atención Preventiva Integrada –PrevenIMSS- de su unidad médica de adscripción para recibir orientación sobre las cantidades idóneas del consumo de sal y azúcar, y de acuerdo el estilo de vida de cada persona.

Finalmente, la directora de la UMF 67 exhortó a la población derechohabiente a que aprovechen en las Unidades de Medicina Familiar del IMSS los departamentos de Nutrición y Dietética, en donde personal especializado les diseñara una dieta personalizada y les otorgara orientación sobre cómo acceder a una mejor calidad de vida, en base a una alimentación saludable y a la práctica de ejercicio físico.