Nuevo Laredo, Tamaulipas. — Lo que inició como un viaje de esperanza para obtener la visa americana se convirtió en una auténtica pesadilla para al menos 14 pasajeros de una camioneta, originarios de San Luis Potosí, que se volcaron en el kilómetro 190 de la autopista Monterrey-Nuevo Laredo, tras ser presuntamente sacados del camino por el operador de un tráiler.

La volcadura dejó al conductor de la unidad sin sensibilidad en las piernas, y a varias mujeres con heridas de gravedad, según reportes de autoridades.

El impacto ocurrió cuando el grupo, que incluía a dos niños, se dirigía al Consulado General de Estados Unidos en Nuevo Laredo, para sus trámites migratorios.

Según el testimonio de los sobrevivientes, el operador de un transporte de carga los sacó del camino y los proyectó fuera de la carpeta asfáltica, para después huir cobardemente del lugar.

Paramédicos de Bomberos de Rescate atendieron al chofer de la unidad, un hombre de 40 años, quien sufrió lesiones severas en las cervicales, la columna y el coxis.

El hombre dijo a los rescatistas que no podía sentir sus extremidades inferiores.

Por su parte, Gloria, también de 40 años, ingresó al hospital con una hemorragia activa por una contusión frontal y una posible fractura de cráneo, mientras que Elizabeth, de 38 años, presentó una deformidad traumática en el brazo derecho, compatible con una fractura de cúbito y radio.

A pesar de lo aparatoso del accidente y de que la camioneta de asesoramiento migratorio terminó destrozada, milagrosamente los dos niños y el resto de los pasajeros resultaron ilesos o con golpes menores que no requirieron hospitalización.

Elementos de la Guardia Nacional División Carreteras se hicieron presentes para iniciar las investigaciones, mientras los cuerpos de emergencia luchaban por estabilizar a las víctimas de esta nueva tragedia provocada por la negligencia en las carreteras.

Sj/Am