Recientemente un lector me hizo una retroalimentación sobre un escrito pasado, me cuestionaba que ¿por qué criticaba al PRI cómo si yo mismo no hubiese participado en él? Y se me vino a la mente al momento de tomar la computadora para escribir, así que en este escrito abordo y aclaro temas.

De inicio le aclaré que él no había leído mis colaboraciones pasadas en donde comenté sobre experiencias mías en aquella época. Claro que nunca niego mi pasado y mi trascurrir en lo que participación política se refiere. Todo ha sido un aprendizaje que ha forjado mi actual postura e ideales.

Mi bisabuelo materno fue alcalde Priista que inclusive gobernó en tres diferentes periodos en su natal municipio de Villagrán, mi abuelo paterno también fue alcalde por el PRI en González, Tamaulipas. Mi padre llegó a militar también, así es que desde niño fui inducido a tal cultura política que dominaba en aquellos años.

La inquietud política supongo fue sino heredada, instaurada desde pequeño. En mi juventud comencé a participar en el Frente Juvenil Revolucionario, admiraba a Colosio, quien era una inspiración para mí. Comencé desde pegando calcas, cargando sillas y demás actividades, ya que mi padre me decía que tenía que empezar desde abajo para comprender y apreciar lo que se hacía y que el día que llegará a encargas de mayor envergadura, lo valoraría y así fue y es.

En un momento por amistades me llegaron a invitar para encabezar lo de la juventud, pero en el PAN, amigos que militaban en él y me guardaban aprecio me instaban a hacerlo por mi visión e ideales. Me hubiese gustado el reto, pero mi padre me impidió hacerlo ya que él trabajaba para el gobierno y me dijo que eso le causaría problemas y que de ahí comíamos en aquel entonces, así que por ello no fructífero.

Fui siempre muy atento y estudioso del tema, mi padre me recomendaba libros sobre ideologías políticas que leí a montones en una época. Siempre me instó a tener una mente abierta y a leer diferentes puntos de vista del mismo tema para después hacer mis propias conclusiones. Desde el Príncipe, de Maquiavelo, El Arte de la Guerra de Sun Tzu y otras decenas de libros que leí y estudié.

Aparte de lo juvenil, colaboré en el sector popular, campesino y otros, hasta después en campañas, desde para presidente, senadores, gobernador, diputados y de todas las existentes. Y desde las labores más sencillas hasta asesor principal de candidatos y de causas de diversos partidos y movimiento.

Mi empuje siempre ha sido colaborar para contribuir cualitativamente para el desarrollo de México y tras mis recorridos he podido hacer amistades de todos los colores y sabores, que de corazón siempre atesoro. Amigos de otros municipios y estados de la república se han comunicado desde hace años como hasta la fecha se comunican conmigo para intercambiar puntos de vista y solicitar consejos.

No soy todólogo, pero he aprendido mucho a través de los años. Claro que entre lo bueno y lo malo, he experimentado vivencias muy satisfactorias y otras muy lamentables. He colaborado con muchos operadores políticos, funcionarios, estructuras y con un énfasis en la planeación y estrategia. Analista de temas políticos nacionales e internacionales que me abren la visión y me ayudan a mantenerme actualizado.

No me encierro en fanatismos ni ideologías muy establecidas, tomo lo mejor de todas y forjo mi propia visión e identidad como bien me enseño mi padre. Por mi trayectoria es que me atrevo a escribir y emitir mis puntos de vista con fundamentos, no critico solo por criticar y/o hacer chisme.

Y claro que por lo vivido sostengo lo que escribo y nunca escondo lo que veo no se hace bien. Para mi persona la autocrítica es fundamental para el crecimiento personal, colectivo e institucional.  ¿Qué no escribo de todo lo que sé y me entero? eso es correcto. Guardo mucho para mí y respeto siempre lo que me confiesan y me piden no comentar.

Aunque en este escrito leerás anécdotas de sucesos reales aún no contadas y que mucho dirán sobre nuestro pasado y presente y en especial de casos de gobernantes de Tamaulipas y otro que no llegó.

Habiendo aclarado lo personal, entremos a lo otro.

¿Por qué critico al PRI y a los demás?, porqué todos, así como tienen su gran valía, todos los partidos y movimientos sin excepción han incurrido en prácticas deleznables que laceran al bien hacer y por ende a la nación. Corrupción, impunidad, nepotismo, tráfico de influencias, etc., etc., etc. Lo hemos visto desde hace décadas y lo estamos viendo ahora.

Cuando comencé a escribir desde hace años columnas emití crítica igual que ahora sin distingo y con ecuanimidad.

Claro que no todos los políticos son corruptos, pero todos interactúan en un sistema que tolera y peor aún, que alienta malas prácticas y hechos. Desde terribles asesinatos hasta colusiones delincuenciales, infames sucesos siguen pasando por que esto se sigue permitiendo y punto. Esto no es de defender colores o fervores, es por la falta de valores.

Tomemos el caso reciente de Carlos Manzo, ¿Por qué se especula y otros aseguran que fue algo perpetrado con participación de políticos? ¡Por qué será! Cuando en Tamaulipas asesinaron a Rodolfo Torre Cantú, a un amigo le avisaron desde muy temprano que ese día no saliera y menos que acompañara al convoy.

Y esto vino de una persona de la Secretaría General de Gobierno, o sea, ya sabían lo que iba a pasar, con todo lo que ello implica. ¿Así es que por que debería de asombrar que esto siga sucediendo? He escuchado y platicado con elementos de seguridad, milicia y otros, que saben que, desde el PRI, hasta la fecha hay colusiones y entendimientos prohibidos.

Se aplaude todo lo bien que han hecho y se hace, pero de la misma manera se tendría que condenar todo aquello que sigue abonando para la putrefacción del sistema político que tanto afecta al país. El negarlo no solo es nefasto, es una terrible equivocación, esto solo generará una creciente irritación social.

Cualquier ciudadano de a pie, como se dice, si hiciera ni el diez por ciento de lo que algunos políticos hacen, ya estuvieran en el bote. Y dejen ustedes que todavía gocen de impunidad y protección, después hasta los premian y aplauden. Gritar en cántico ¡No estás solo, no estás solo!, a un evidente delincuente, es algo infame, pero háganle entender eso a los nefarios fanáticos, ¡por el amor de Dios!

Si nuestros estándares de permisividad son tan laxos, pues muy laxa será nuestra justicia.

Cuando debería de prevalecer el razonamiento lógico, vemos que se peca de generar un mundo al revés, Si al alcalde Layin que un día admitió que robó poquito el muy descarado, quedó más como un asunto que causó hasta gracia para muchos y que no tuvo consecuencias, imagínense como nos encontramos como sociedad.  

No se pide perfección, pero tampoco el desentenderse de una muy palpable realidad. No está el horno para bollos, aparte de que el clima social se está calentando de una manera que debería preocupar. En los dos últimos siglos precisamente por fuertes injusticias sociales se desataron movimientos que derivaron en conflictos. Ayudemos para que este siglo sea la excepción.

A otra amistad un día le llegó un amigo soldado a su casa y lo llevó a dar una vuelta, y en el trayecto le pasó una carpeta para que la viera. Eran documentos que evidenciaban a un testigo protegido que era un gran amigo de él, y se la enseñaron para que supiera él por qué había fallecido. Iba a testificar contra un gobernador.

Hace poco dos elementos de la marina fallecieron en circunstancias extrañas, uno por suicidio y otro en un campo de tiro. En este país el que mucho sabe mucho preocupa, así como el que mucho preocupa de él se ocupan.

Aterrador pero muy real lo que vivimos.

A mi padre un día lo mandó llamar un gobernador, después que él alzó la voz en contra de actos de fuerte corrupción en su área de competencia laboral. Le dijo que lo estimaba mucho y que sabía sobre su inteligencia e integridad pero que debía entender aquello de que “el sol sale para todos” En esa época se traficaban drogas y armas con la venia de él.

¿Por qué ahora mencionar diversas anécdotas de este tipo?

Porque son un referente de que pasan los años y administraciones y lo que ahora se ve, se veía entonces y de no haber cambios profundos, se seguirán viendo después. No es el ser ingenuo sobre querer tener un país utópico, es el verdaderamente anhelar y abrir los ojos para efectos de poder tener un mejor futuro para todos.

Cuando por años estás inmerso en un ambiente así, de cierta forma te aclimatas a muchas situaciones y perversiones y no ves las cosas en su justa dimensión. Como aquello de ver solo de frente a los árboles y no dimensionar el bosque en el que t6e encuentras Hace poco vi un reportaje que hicieron en Europa sobre la situación de nuestro país y en verdad caló.

Y como no, imagínense que fueras de otra latitud y te hablaran sobre un país con miles de muertes y desaparecidos, un país considerado de los más corruptos, una tierra en donde la tasa de muertes de periodistas, políticos y hasta sacerdotes es muy alta. En donde tienen hasta un dicho de que el que no transa no avanza, una nación que festeja tener a su primera mujer presidente, pero la misma que salió a caminar y la acosaron y toquetearon.

¿Qué pensarías tú de ese país?

México lo representa una bandera tricolor con un águila devorando a una serpiente, fuera de esos colores los demás solo son representativos de facciones de una sociedad y agrupaciones políticas y no de todo México. Así que no es algo en contra de nadie en específico y menos tendencioso, es algo que nos incumbe y mancha a todos.

Si sabemos que la serpiente ahora está devorando al águila, en verdad deberemos de recapacitar de manera pareja.

“Más si osare un extraño enemigo profanar con su planta tu suelo, piensa ¡oh Patria querida! que el cielo un soldado en cada hijo te dio.” versa nuestro himno. En la actualidad son o somos los mismos mexicanos que estamos profanando su suelo, olvidándose muchos que el cielo nos dio a ella como soldados en estos casos.

México nos necesita a todos, es tiempo de actuar.

Algo más para reflexionar

En la profunda sapiencia y lógica de Mario Delgado:

Si los niños que no nacen no van a las escuelas, entonces los combustibles que se trafican ilegalmente no pagan impuestos.

Gran sabiduría sobre natalidad y asistencia escolar, así como del huachicol fiscal.

Reflexión final

Nunca es tarde mis hermanas y hermanos mexicanos.

Jorge Alonso Infante Alarcón  

Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.

Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)