Nuevo Laredo, Tamaulipas. — Un aparatoso accidente vial en la colonia Madero de Nuevo Laredo desató el pánico esta tarde, luego de que un camión de la empresa de paquetería Castores derribó dos postes de madera, cayendo uno de ellos directamente sobre el vehículo de una madre que esperaba a su hijo a la salida de un centro educativo.

A pesar de la magnitud del impacto, que dejó al vehículo Ford Focus dañado, afortunadamente no se reportaron personas lesionadas.

Sin embargo, la situación escaló, ya que el conductor de la unidad, identificado como Alejandro, de 23 años, admitió no contar con un seguro que cubriera los cuantiosos daños materiales.

El percance se registró en el cruce de la avenida Reynosa y la calle Santa Gertrudis.

Según el reporte de Tránsito, Alejandro, originario de Tabasco, circulaba de norte a sur cuando la altura de su camión se enganchó con el cableado de la empresa telefónica.

El estirón fue suficiente para quebrar y arrancar dos postes de madera de Telmex. Uno de los postes quedó colgando peligrosamente, sostenido sólo por los cables tensos, mientras que el segundo se desplomó sobre el automóvil de la madre de familia, quien se encontraba estacionada a la espera de la salida de su hijo de la estancia educativa aledaña.

La caída del poste sobre el vehículo causó una alarma inmediata en la zona, interrumpiendo las actividades del centro educativo y atrayendo la atención de numerosos testigos.

Además del automóvil siniestrado, el incidente provocó serios daños a la infraestructura local. Los postes caídos afectaron severamente el servicio de telecomunicaciones y energía eléctrica. Específicamente, la mufa del domicilio marcado con el número 2611 de la calle Santa Gertrudis sufrió daños, dejando a la vivienda sin suministro eléctrico. También se registró un daño menor en el tejado de una casa cercana.

El tráfico en el sector se vio significativamente entorpecido, requiriendo la intervención de autoridades de Tránsito para gestionar la vialidad.

Personal de Telmex acudió al sitio para comenzar las labores de reparación y restablecimiento del servicio. Mientras tanto, el conductor del camión de paquetería dialogaba con los afectados.

La incertidumbre aumentó cuando Alejandro confirmó a los propietarios del vehículo y del domicilio afectado que carecía de una póliza de seguro que pudiera responder por la reparación de los daños.

Esta revelación deja a los afectados en una situación precaria, obligados a negociar directamente con el chofer o la empresa Castores para obtener la compensación correspondiente.