Tampico, Tamaulipas. - A los trabajadores del Sindicato de Foseros, Cementerios y Agencias Funerarias de Tampico les ha tocado ver de todo cuando se habla de la colocación de hechizos, amarres, conjuros o embrujos por parte de 'santeros' o 'brujas' que llegan hasta las tumbas de los cementerios, aprovechando las energías que aquí afloran.

Don Silverio Dámaso Domínguez Guerrero narró con un lenguaje sencillo que sus compañeros trabajadores del Sindicato de Foseros, han sido claramente testigos de estas acciones que no necesariamente se realizan a media noche o en horas de la madrugada.

Dijo que durante años han sido testigos él y sus compañeros de todos estos trabajos malévolos, es por eso que apenas llega a su casa de regreso de laborar se 'baña' con agua bendita, para alejarse de esa maldad que fueron a depositar en las tumbas individuos que buscan hacerle daño a otras personas.

Advirtió que normalmente observan que han sido enterrados frascos con ciertas sustancias, encontrando en su interior ropa íntima, fotografías tanto de hombres y mujeres, y hasta muñequitos de peluche, los cuales como se apunta se esconden entre las fosas, previo a escarbar en las periferias de las tumbas.

Explicó que donde es más visible esta acción de enterrar amarres, embrujos o trabajos de brujería es en el Cementerio Municipal de Tancol, aunque para los 'brujos', 'brujas' o 'santeros' cualquier camposanto sirve para sus hechizos.

De acuerdo a su experiencia de 58 años de trabajar en los cementerios como fosero o sepulturero, pues al de la avenida Miguel Hidalgo llegó a los siete años, expuso que los 'brujos' 'buscan' las tumbas donde fueron inhumadas personas adultas o niños que hayan tenido una muerte violenta, ya sea atropellados o que fallecieron en algún accidente grave, porque según esas creencias de magia, 'las energías que afloran de esas tumbas contribuyen a una mayor efectividad de los encantos'.

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Don Silverio Dámaso Domínguez Guerrero