Altamira, Tamaulipas. - La industria instalada en Altamira dejará de extraer agua de la Laguna de Champayán para sus procesos productivos a partir del año 2027, gracias a la puesta en marcha de la nueva Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, una obra clave que busca garantizar el abasto doméstico y comercial y avanzar hacia la sostenibilidad hídrica.

El gerente de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa) de Altamira, Gabriel Arcos Espinosa, informó que este nuevo complejo podrá procesar hasta 400 litros de aguas residuales por segundo en su primera etapa, lo que permitirá que el líquido tratado se destine al sector industrial, el de mayor consumo en la región. Con ello, se liberará agua dulce para la población y se fortalecerá la capacidad de atracción de nuevas inversiones.

“Estamos trabajando para que Altamira sea un municipio con infraestructura hidráulica de primer nivel, cuidando nuestras lagunas y asegurando agua para el futuro”, afirmó Arcos Espinosa.

El gerente destacó también la rehabilitación integral de varios cárcamos y el saneamiento de las antiguas lagunas de oxidación en el sector Laguna Florida, lo que permitió redirigir aguas residuales hacia la zona de La Pedrera, reduciendo la contaminación del sistema lagunario de Champayán.

Además, se restauró de manera integral la Planta Tratadora de Aguas Residuales de Villa Cuauhtémoc, que hoy sanea hasta 32 litros por segundo de aguas provenientes de comunidades rurales, beneficiando a más de 12 mil habitantes.

Con la operación conjunta de las plantas de Villa Cuauhtémoc, Tierra Negra y próximamente La Pedrera, Altamira tendrá 95 % de sus aguas residuales tratadas para 2027. El 5% restante se cubrirá con la instalación de letrinas ecológicas en ejidos de difícil acceso.

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