Ciudad Victoria, Tamaulipas. - La venta de terrenos ubicados en zonas ejidales que han sido absorbidas por el crecimiento urbano de ciudades como Ciudad Victoria, Matamoros, Reynosa y Altamira va en aumento, a pesar de que muchos de estos predios no cuentan con permisos para fraccionamiento ni reúnen los requisitos legales para ser escriturados.

Ramiro Lozano González, titular de la Procuraduría Ambiental y Urbana de Tamaulipas (PAUT), advirtió que esta práctica se ha convertido en un delito recurrente, conocido como fraccionamiento ilegal, por el cual ya se han presentado al menos 60 denuncias formales ante las autoridades competentes.

“Los propietarios, aunque tengan el dominio pleno del terreno, muchas veces están mal informados o no cuentan con los permisos que otorgan el Estado y el Municipio para fraccionar legalmente una propiedad”, señaló.

Explicó que, en muchos casos, familias han sido víctimas de líderes de organizaciones o particulares que les ofrecieron predios a pagos o de contado, sin aclarar que estos terrenos no podían ser escriturados ni contaban con servicios básicos.

Para que un terreno pueda dividirse legalmente y ser vendido, el propietario debe presentar ante el municipio un proyecto urbanístico completo, que incluya la viabilidad de uso de suelo, así como permisos de CFE, Comapa, drenaje pluvial, alumbrado público y otros servicios.

“Se requiere un anteproyecto que defina cómo quedaría el fraccionamiento, con el visto bueno de las autoridades correspondientes. Solo así se puede proceder legalmente con la venta”, detalló.

El funcionario subrayó que los compradores deben estar conscientes de que adquirir un terreno sin escrituras ni servicios implica altos riesgos: no podrán legalizar la propiedad ni garantizar el acceso a infraestructura básica como agua, luz, drenaje, banquetas o áreas verdes.

Lozano González exhortó a la población a verificar el estatus legal de los terrenos antes de adquirirlos, y a denunciar cualquier intento de venta irregular ante la Procuraduría Ambiental y Urbana.

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