Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Por el desbordamiento de ríos y lagunas, justo antes de la llegada de una fuerte avenida de agua y con pronóstico de intensas lluvias durante al menos tres días, a partir de este domingo, fueron evacuados habitantes de los municipios de Tampico, Madero y Altamira.

A través de su cuenta oficial, la coordinación estatal de Protección Civil, informó que se mantiene la alerta en los márgenes del Río Pánuco, en Tampico, y ya se instaló un puesto de mando en la zona conurbada para coordinar acciones y apoyar a la población en caso de desbordamientos.

Hasta ahora, cuatro familias han sido evacuadas de la margen del Río Tamesí, en Tampico, por elementos del Ejército y la Marina.

Raúl Quiroga Álvarez, titular de la Secretaría de Recursos Hidráulicos para el Desarrollo Social, advirtió que la emergencia se intensifica por la tormenta tropical “Barry”, que ya tiene 70 por ciento de probabilidad de convertirse en ciclón en las próximas horas o este domingo, lo que provocaría lluvias fuertes a intensas de domingo a miércoles en el sur, centro y región cañera del estado.

Subrayó que los ríos Pánuco y Tamesí registran un importante aumento de nivel debido a escurrimientos provenientes del centro y norte del estado, lo que representa un riesgo para miles de habitantes.

“Para tomar las mejores decisiones y alertar a la ciudadanía en caso de ser necesario, se mantiene una constante comunicación con las autoridades de la zona sur de Tamaulipas, hasta hoy tenemos encharcamientos en algunas calles y colonias como La Moscú, Pescadores e Isleta”, señaló el funcionario.

Comentó que se han habilitado seis albergues para atender a la población de zonas vulnerables, mientras que, en la colonia Pescadores, ya comenzaron las evacuaciones a través del Plan DN-III.

"Estamos haciendo perifoneo para que la gente esté enterada y pueda ir tomando previsiones".

Quiroga Álvarez, sostuvo que autoridades estatales y municipales advierten que, si los escurrimientos e intensas lluvias coinciden, podrían presentarse severas inundaciones, el peor escenario para la región.