Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Un accidente automovilístico registrado en calles de la colonia Los Cántaros en Nuevo Laredo dejó como saldo dos niños lesionados y un conato de riña entre los familiares de los conductores involucrados.

Afortunadamente, la situación fue controlada por elementos de la Dirección de Tránsito.

El percance sucedió en el crucero de las calles Cántaros y Carlos Osuna, ubicado en el norponiente de la ciudad.

En el incidente se vieron involucrados un vehículo Ford Fiesta modelo 2017, conducido por Aarón, de 26 años, y un Ford Focus modelo 2011, manejado por Máximo, de 20 años.

En el Ford Fiesta viajaban Aarón, su esposa y sus dos hijos menores, Ian de 6 años y Gretel de 3. Fueron precisamente los niños quienes resultaron con golpes.

Personal de Protección Civil y Bomberos acudió al sitio para brindarles atención prehospitalaria y los trasladaron al Hospital del Seguro Social para una valoración médica más detallada.

Según la declaración de Aarón, conductor del Ford Fiesta, circulaba de sur a norte por la avenida Carlos Osuna. Al llegar a la calle Cántaros, realizó el alto correspondiente.

Sin embargo, al intentar avanzar, tuvo que asomarse ligeramente debido a que otros vehículos obstruían su visibilidad del crucero. Fue en ese instante, relató, cuando su automóvil fue impactado por el Ford Focus, que se desplazaba de oriente a poniente.

Aarón señaló que el conductor del Ford Focus supuestamente iba hablando por teléfono, lo que pudo haber provocado la distracción y el choque.

Mientras los paramédicos atendían a los menores lesionados, los conductores y sus respectivos familiares comenzaron una acalorada discusión, intercambiando acusaciones mutuas y estando a punto de llegar a los golpes.

Afortunadamente, la rápida intervención de los oficiales de Tránsito presentes en el lugar permitió mediar en la situación y controlar los ánimos, evitando que el conato de bronca escalara a mayores.