Ciudad Victoria, Tamaulipas. - Fernando Campos Martínez, exfuncionario estatal y actual aspirante a magistrado del Poder Judicial de Tamaulipas, enfrenta una batalla jurídica y política sin precedentes. Aunque su registro fue rechazado por los responsables de seleccionar candidatos, Campos no ha abandonado la contienda: actualmente recorre el estado en campaña, amparado legalmente y con el respaldo de una red ciudadana que lo impulsa como candidato emergente.

“Me registré porque he sufrido persecuciones políticas, como muchos otros tamaulipecos. Ya basta de usar la justicia para golpear enemigos o rivales”, dijo Fernando Campos durante una entrevista con HOYTamaulipas.

Campos evocó los embates vividos durante la administración pasada, pero también hizo referencia a los ataques recientes que asegura haber recibido de la actual.

El exfuncionario asegura que su exclusión del proceso carece de fundamentos claros.

"No me dijeron por qué me negaron el registro. Presentamos un amparo, y mientras no se resuelva, seguiremos en campaña. Si ganamos, tienen que restituirme el derecho a competir", explicó.

Campos considera que la falta de una notificación formal le da elementos suficientes para que una instancia judicial superior revierta la decisión.

Su propuesta está basada en una justicia “con rostro humano”. A diferencia de otros contendientes, dice, él ha estado en las colonias, ha trabajado desde la sociedad civil y no busca el cargo para servirse, sino para servir.

“Jamás habías visto a estos aspirantes en una colonia. Están perdidos, porque nunca habían salido a territorio. Yo llevo años trabajando con la gente”, afirmó.

Fernando Campos acusa que el proceso de selección es opaco y controlado. Denuncia que los votos serán contados sin observadores de partidos ni garantías claras, por lo que ha pedido a sus simpatizantes escribir su nombre a mano en la boleta rosa, bajo el cargo de "magistrado", y enviarle fotografías como comprobante.

“Queremos demostrar cuánto respaldo real tenemos, aunque no aparezcamos en la boleta. Vamos a contar nuestros propios votos”.

Respecto a los riesgos de politizar al Poder Judicial, Campos es crítico: "No estoy de acuerdo con este proceso porque es una simulación. Los jueces no deben ser electos por popularidad, pero si ya estamos aquí, hay que dar la batalla y evidenciar las fallas".

En el ámbito legal, asegura que sigue firme: si su amparo no prospera, recurrirá a la Sala Regional. Y si la justicia le da la razón, exigirá ser incluido en la elección.

Al finalizar la entrevista, lanzó un mensaje directo a la ciudadanía: "Hay que participar. Si el pueblo ya tiene este derecho, hay que ejercerlo. Exijamos una justicia cercana, transparente y sin persecuciones".