Ciudad Victoria, Tamaulipas. - Hoy la radio enmudeció por un instante, se apagó una de sus voces más queridas, entrañables y representativas, el gran maestro Eleno Vogel Silva, ícono de la radiodifusión en Ciudad Victoria, falleció dejando tras de sí un legado de profesionalismo, alegría y cercanía con su audiencia.

Durante décadas, Eleno fue más que una voz en la radio, fue un compañero fiel de las mañanas, una chispa de humor en La Cotorra, un apasionado narrador de los deportes y el inconfundible pronosticador del clima que, con picardía y calidez, conectó con generaciones de victorenses.

Quienes lo escucharon saben que su energía era contagiosa, además hacía del pronóstico meteorológico algo más que un dato, lo convertía en una experiencia. Su estilo único lo convirtió en parte del paisaje cotidiano de la ciudad.

En los micrófonos también vibró su amor por el deporte, analizaba jugadas con ojo crítico y corazón aficionado. Su voz emocionada acompañó incontables momentos históricos para el deporte local, y su presencia era sinónimo de entrega.

“Eleno no solo te contaba lo que pasaba, te lo hacía sentir”, recordaron colegas de la radio esta mañana, consternados por su partida.

La radio victorense está de luto, pero también de pie para rendir homenaje a uno de los suyos, a ese hombre que supo hacer de un micrófono un puente entre él y su comunidad, que supo informar, entretener y acompañar con la autenticidad de quien amó profundamente su oficio.

Descansa en paz, Eleno Vogel Silva. Tu voz quedará por siempre resonando en la memoria de quienes crecimos escuchándote.