Nuevo Laredo, Tamaulipas.— A casi una semana del incendio que cobró la vida de un migrante hondureño en la colonia Palacios de Nuevo Laredo, el cuerpo del hombre sigue sin ser identificado por las autoridades ministeriales, ni reclamado por sus familiares.

El hombre, cuya edad se estima entre 50 y 55 años, rentaba una de las viviendas que se incendiaron el pasado domingo 11 de febrero, cerca del crucero de Tomás F. de la Garza y Lincoln.

Según el dueño del inmueble, Jesús, el migrante había llegado hace unos días y trabajaba en el rastro de la ciudad.

El fuego se originó por causas desconocidas y se propagó rápidamente por las casas de la parte trasera de la propiedad, donde había varias familias.

El hombre quedó atrapado en su vivienda y no pudo ser rescatado por los elementos de Protección Civil y Bomberos que acudieron al lugar.

El cuerpo del migrante quedó “carbonizado”, según personal de la funeraria Valdez, donde permanece resguardado a la espera de ser identificado.

Hasta el momento, nadie se ha acercado a preguntar por él, ni a proporcionar algún dato que ayude a su reconocimiento.

Si el cuerpo del migrante hondureño no es identificado ni reclamado en los próximos días, podría ser enviado a la fosa común.