Nueva York, NY, (Agencia Informativa de México).- El secretario del Departamento de Estado de Estado Unidos de América, Antony J. Blinken, pidió este jueves a los miembros del consejo (y, para el caso, todos los estados miembros de la ONU) deberían presionar a Rusia para que detenga las acciones que están empeorando la crisis alimentaria en Ucrania y en todo el mundo.

Durante la reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre inseguridad alimentaria y conflictos el funcionario estadounidense aseguró que los conflictos en todo el mundo están impulsando cada vez más la crisis alimentaria.

“Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación y el Programa Mundial de Alimentos, el número de personas afectadas por la inseguridad alimentaria debido a los conflictos aumentó de unos 100 millones de personas en 2020 a unos 139 millones de personas en 2021 y a un estimado de 161 millones de personas en 2022. El Banco Mundial cree que la guerra de Rusia en Ucrania podría sumar otros 40 millones de personas a este total”, informó.

Y aseguró que el Consejo de Seguridad de la ONU tiene “la responsabilidad única” de abordar la crisis actual, que constituye una grave amenaza para la paz y la seguridad internacionales y señaló que se tiene que comenzar con “llamando enérgica e inequívocamente al Kremlin por sus atrocidades en Ucrania y por empeorar la crisis alimentaria mundial a través de una guerra de agresión no provocada”.

“Dejen de bloquear los puertos en el Mar Negro y el Mar de Azov. Permitir el libre flujo de barcos, trenes y camiones que transportan alimentos fuera de Ucrania. Deje de impedir que los alimentos y otros suministros vitales lleguen a los civiles en los pueblos y ciudades ucranianos sitiados”, subrayó.

“Deje de amenazar con retener las exportaciones de alimentos y fertilizantes de los países que critican su guerra de agresión. Todo esto es esencial para salvar vidas en Ucrania y para salvar vidas en todo el mundo. La Federación Rusa no es el único gobierno u organización que explota la inseguridad alimentaria para sus propios fines cínicos”.

Adicionalmente, dijo que en Sudán del Sur, los grupos armados y las partes beligerantes han bloqueado durante años la asistencia humanitaria a los civiles y apuntó que los expertos estiman que hasta 7 millones de personas enfrentarán niveles críticos de inseguridad alimentaria en el país este año.

“En Siria, con el apoyo continuo del Kremlin, el régimen de Assad ha asediado comunidades como Ghouta Oriental y ha causado la hambruna generalizada de su propio pueblo. También obstruye rutinariamente la entrega transfronteriza de ayuda humanitaria vital, robando e incluso atacando convoyes de las Naciones Unidas, como hemos discutido repetidamente en este consejo”, acotó.

En su mensaje ante miembros del Consejo de Seguridad solicitó denunciar “sistemáticamente” a los gobiernos y grupos armados cuando utilizan tácticas similares, como atacar los medios de producción y distribución de alimentos, impedir que la ayuda humanitaria llegue a quienes la necesitan, asediar a la población civil.

“Las Naciones Unidas se crearon con el objetivo de promover los derechos humanos y prevenir atrocidades, incluida la atrocidad de usar el hambre como arma contra civiles… Depende de nosotros evitar que esta historia se repita, asegurarnos de que el pasado no sea un prólogo. Es simple: la vida de millones de personas depende de ello”, concluyó.