Ciudad de México. - La banca en México cuenta con indicadores de liquidez y solvencia por encima de los mínimos regulatorios, así como una morosidad acotada, lo que le permite mantener la oferta de crédito sin descuidar la calidad de la cartera, situación que incluso fue recientemente reconocida por el Fondo Monetario Internacional, informó Daniel Becker, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).

Al compararse con otros países, comentó, México muestra niveles de capitalización y calidad de cartera favorables: su Índice de Morosidad (IMOR), ubicado en 2.3%, con datos a septiembre de 2021, es mejor que el de países como Brasil, Francia, España o Italia. El Índice de Capitalización (ICAP), por su parte, con datos de agosto 2021, se ubicó en 18.4%, por encima del de países como Estados Unidos, Canadá, España o China.

Acompañado del Comité de Dirección, conformado por el presidente ejecutivo, Rodrigo Brand, y los vicepresidentes Eduardo Osuna, Adrián Otero, Julio Carranza y Raúl Martínez-Ostos, Becker aseguró que se observa mayor dinamismo en la banca, lo que es una señal clave de la recuperación económica y de que hay buenas perspectivas.

Aunque las empresas aún no demandan crédito al mismo ritmo que en el periodo pre pandemia, dijo, desde el segundo trimestre de 2021 se observa un claro punto de inflexión en las carteras de crédito bancario, que son reflejo de la reactivación económica y responden directamente a la demanda de empresas y hogares. Especialmente en crédito a la vivienda, que continúa con buen ritmo de crecimiento; y en Tarjeta de Crédito (TDC), que entre enero y octubre de 2021 facturó $970 mil millones de pesos, un 28.2% más que el mismo periodo del año anterior.

Becker señaló que México necesita mayor inversión para detonar mayor crecimiento económico de largo plazo. Hoy el 88% de la inversión proviene de fuentes privadas y se requiere incentivar su crecimiento para potenciar el crédito empresarial. Para esto, la banca está lista con $1.3 billones de pesos disponibles para financiar a empresas y familias, por lo que es, sin duda, factor fundamental para la reactivación económica.

Por su compromiso con una nación más incluyente, los bancos en el país impulsan una importante agenda social para el desarrollo de México. En este 2021, la ABM cumplió a cabalidad su compromiso de organizar la Semana Nacional de la Educación Financiera (SNEF), en la que participaron más de 1.8 millones de personas, más del doble que en 2020.

 
Becker informó que, además, la ABM firmó un acuerdo de colaboración con la Agencia Alemana de Cooperación para el Desarrollo (GIZ), con el objetivo de establecer una agenda que promueva el desarrollo sostenible en la banca comercial de México, en beneficio del clima, del medio ambiente y de la sociedad.

 
Esto se suma a la colaboración que la Asociación tiene con aliados internacionales para impulsar iniciativas en beneficio del desarrollo sustentable, como la UNEP-FI, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, la Corporación Financiera Internacional (IFC) o el Banco Interamericano de Desarrollo (BID); así como su participación en el Consejo Consultivo de Finanzas Verdes (CCFV), del que es miembro fundador.

La banca en México, concluyó, está comprometida con una visión más social e incluyente y cuenta con la capacidad para hacer frente a las necesidades de financiamiento que demanden las empresas y las familias mexicanas.