Ciudad Victoria, Tamaulipas. – El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, volvió a insistir en que no hay persecución contra nadie, porque no es su fuerte la venganza, aclarando que la investigación que se sigue contra Ricardo Anaya es por una denuncia que presentó el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya.

“Ese señor (Lozoya) presentó la denuncia diciendo que él entregaba dinero a legisladores y a dirigentes de partidos para que se aprobara la reforma energética, ese es el fondo del asunto”, manifestó el ejecutivo federal durante la mañanera de este martes.

Precisó que con esa reforma las únicas que ganaron fueron algunas empresas, sin embargo, afectó a la ciudadanía en general porque posterior a su aprobación vinieron muchos aumentos.

“Y qué se ganó con la reforma energética, nada, al contrario, se perdió, entregaron esos sobornos para que se aprobara y resulta que se entregaron concesiones para que algunas empresas hicieran jugosos negocios en Pemex y en la CFE”.

Y añadió;

“Pero qué ganaron los ciudadanos, repito nada, perdieron, porque a partir de esa reforma energética aumentaron los precios de las gasolinas, del gas, de la luz, se puede probar”.

López Obrador puntualizó que esa corrupción no se debe de permitir ni en el gobierno federal ni en el Poder Legislativo, tampoco en el Poder Judicial, ni en los gobiernos estatales ni municipales.