+ El PRI aún tiene posibilidades de remontar, pero con cuadros respetables 

+ Los culpables del fracaso de la consulta popular apetecen ser candidatos  

+ Alcaldes que van de salida, paran servicios municipales por falta de ‘lana’ 

En los comicios de junio próximo pasado, quedó demostrado que la alianza entre los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) sólo conduce al fracaso en cuanto a gubernaturas se refiere. 

Recuérdese que en los 11 estados en que jugaron coaligados cayeron ante Movimiento Regeneración Nacional (morena), en diez, y en uno frente al Partido Verde Ecologista de México (PVEM). 

Sin embargo, con miras al proceso del 2022, en que se renovarán seis gubernaturas –Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas--, sus dirigentes nacionales traman jugar nuevamente juntos, a fin de, según ellos, impedir la propagación del lópezobradorismo. 

Por fallo centralista, obviamente se darían las sociedades ocasionales. Pero si en cuenta tomaran la opinión de sus estructuras en ningún caso les avalarían, éstas, tan insensato acuerdo. 

Sobre todo, porque esa ensalada de colores e ideología precisamente, arrastró a los tres partidos al fracaso en Baja California, Baja California Sur, Campeche, Colima, Michoacán, Nayarit, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas que, durante décadas, fueron considerados bastiones suyos. Desde luego. 

Ahí están los escrutinios que no admiten lugar a dudas. 

Como fuere la opinión de sus estructuras y/o militancia poco interesa a Marko Antonio Cortés Mendoza, Rafael Alejandro Moreno Cárdenas y José de Jesús Zambrano Grijalva, pues convencidos están que aliándose ‘serían invencibles’ el año próximo. 

¡Vaya, estupidez! 

¿Acaso no han entendido que los priistas de cepa rehúsan andar de la mano con la estirpe albiceleste, o viceversa? ¿O que unos y otros ‘repelen’ a la malograda izquierda enquistada en el membrete del Sol Azteca? 

Yéndonos más abajo, en sus estructuras, ninguno de los soldados que han hecho talacha durante años en busca de una oportunidad aceptaría de nueva cuenta imposiciones y, quizá, otra vez vote en contra de su partido y los candidatos designados por su majestad: ‘El dedo’. 

De ahí, considero, la inutilidad de las alianzas rumbo al 2022. 

Oportunidad priista 

Los desacuerdos entre quienes se ostentan como amigos del presidente en aras de la candidatura gubernamental, obviamente fracturan más todavía al inoperable (es decir inexistente) Comité Directivo Estatal (CDE) de morena. 

A la fecha suman +/- una decena de aspirantes. 

En cuanto al membrete albiceleste, aparecen ya en el escenario cuatro actores plenamente identificados con el jefe del Ejecutivo estatal, aunque el rechazo poblacional hacia el sistema establecido se mantiene según dictan los resultados de la elección más reciente.   

Por parte del tricolor, dos han aceptado buscar la candidatura: Enrique Cárdenas del Avellano y Ramiro Ramos Salinas. 

Pero su capacidad de convocatoria ha resultado casi nula, como se ha consignado en las encuestas levantadas hasta el momento. 

Así que para reactivar al priismo se requiere una figura con talento. Un cuadro respetable, capaz de conjugar su experiencia política con liderazgo, para darle certidumbre a la militancia. 

Ante este escenario, el mentado ‘Alito’ podría convocar a figuras como Óscar Santiago Luebbert Gutiérrez, Baltazar Hinojosa Ochoa, Homero Díaz Rodríguez, Edgar Melhem Salinas y Alejandro Etienne Llano, entre otros. 

No para ser candidatos, quizá, sino para reencausar el rescate del PRI en Tamaulipas. 

Óscar cuenta con capital político propio, igual que Baltazar. 

Y Homero es un político congruente entre su forma de pensar y actuar; es respetable y respetuoso, profesional en su actividad, por lo que podría si él quisiera, abonar al rescate del PRI en este proceso. 

Conoce Díaz Rodríguez los entretelones de la política doméstica, por haber sido diputado federal y secretario General de Gobierno. 

Así que no descarte usted que anime él, el resurgimiento del PRI. 

Desde luego incluyendo a todos los militantes, simpatizantes olvidados y ciudadanos en general, como igual, creo, es la idea de Etienne Llano y el dirigente estatal en funciones, Melhem Salinas. 

En la próxima legislatura (LXV) de la Cámara baja, por lo que observo, no tendrá el PRI diputados que representen a Tamaulipas; en el Congreso local (también LXV Legislatura), quizá logre tres curules, aunque se afirma que sólo tendrá dos plurinominales; mientras tendrá presencia municipal en 4 localidades (Abasolo, Güémez, Guerrero y Jiménez). 

Así que es buen momento de ponerse a trabajar para reposicionarlo y hacerlo competitivo en el proceso que inicia el 12 de septiembre próximo. 

Pero claro, esto se lograría solamente inyectándole vigor a la cruzada. Con políticos experimentados y comprometidos. Y no con alianzas inútiles. 

Los culpables 

En una lectura cualitativa, los adalides locales de morena y su aliado, (PT), aducen que con la consulta popular avanzó la democracia participativa, ya que a las urnas acudieron 174 mil 721 ciudadanos, votando a favor de que lleve al cadalso a los expresidentes--, mientras 2 mil 801, dijeron no; y 732 se abstuvieron, aunque sí respondieron a la convocatoria.  

Sin embargo, para el grueso de la población, en términos cuantitativos, fue un fracaso total, ya que sólo participó el 6.49 por ciento de los electores enlistados nominalmente --el registro alcanza 2 millones 744 mil 953--, y es la estadística que marca el escrutinio. 

Cierto es que el Instituto Nacional Electoral (INE) le metió tres trampas al proceso: 

1) Condicionar a nivel nacional 37 millones 439 mil 23 votos a favor de que se vincule judicialmente a los antecesores del presidente en funciones, significando esto el 40% de la lista nominal --93 millones 597 mil 559--, aún cuando la cifra a duras penas ha sido rebasada en contiendas sexenales; 

2) Su falta de promoción, para que los ciudadanos se interesaran en la consulta popular; y 

3) La desorganización para instalar 57 mil 124 mesas receptoras como puntualmente se ha confirmado. 

No obstante, al menos aquí en Tamaulipas, los panegiristas de Andrés Manuel López Obrador –militantes de morena, o no--, tuvieron la obligación desde admitida la consulta de divulgarla personalmente y a través de todos los medios a su alcance, pero salvo algunas excepciones quisieron hacerlo al cuarto para las doce. 

Sobre todo, los aspirantes a la candidatura gubernamental, como (bajo estricto orden de su primer apellido) resultan María Guadalupe Covarrubias Cervantes, Nora Hilda de los Reyes Vázquez, Héctor Martín Garza González, Felipe Neri Garza Narváez, Eduardo Abraham Gattás Báez, José Ramón Gómez Leal, Erasmo González Robledo, Rodolfo González Valderrama, Mario Alberto López Hernández, Maki Esther Ortiz Domínguez, Adrián Oseguera Kernion, Alejandro Rojas Díaz Durán y Américo Villarreal Anaya. 

Más lo que se acumulen esta semana. 

Obviamente, casi todos culpan al senador Villarreal Anaya de no haber impulsado, acertadamente, la participación ciudadana, pues, de última hora (comentan), él hizo un llamado a acudir a las urnas, siendo que tiempo tuvo de sobra en su comisión; igual que los diputados locales electos que militan en el membrete petista: José Braña Mojica y Juan Vital Román Martínez. 

Esto confirma que morena atraviesa un problema divisionista grave, en lo interno y que al exterior --pese al posicionamiento de la marca también a la baja--, el panorama le resultaría adverso en 2022. 

Correo: jusam_gg@hotmail.com 

Caminante no hay camino 

En su mala proyección municipal, hay alcaldes que dejan al garete atender la prestación de servicios públicos, so pretexto de haberse acabado, ya, los recursos económicos. 

Y eso que estamos a menos de dos meses de su relevo. 

Y a cinco de concluir el año fiscal (que involucra el presupuesto anual). 

Quiere decir, entonces, que será hasta febrero o quizá marzo del 2022 cuando se atiendan nuevamente la recolección de basura, el suministro de agua potable, la limpieza de las calles y avenidas, el alumbrado público, el mantenimiento de áreas verdes y las obras para taponear los cráteres que han aparecido en todas las arterias viales, ocasionando estos deterioros al parque vehicular tanto privado como público. 

Se hace camino al andar 

Manuel Muñoz Cano, ya despacha como dirigente estatal del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), aunque su unción oficial se dará en breve. Y dada su experiencia política, es de esperarse que abone a su crecimiento. 

Llega Manuel a esta su tierra natal precedido de un triunfo en San Luis Potosí, donde colaboró de cerca con el gobernador electo (PVEM), Ricardo Gallardo Cardona. 

Usted bien conoce a Manuel, quien fue secretario de Desarrollo Social y cuadro directivo del membrete tricolor. 

Ahora como tarea principal trae la consigna de acrecentar la presencia del partido verde. 

Cicuta 

Hay una sola candidatura gubernamental, aquí, en Tamaulipas. Y muchos aspirantes de morena. Sobre todo. 

¿Andrés Manuel López Obrador se decidirá por su afecto hacia alguno de ellos o ellas? 

¿O hará válida su oferta de privilegiar la democracia? 

La moneda está en el aire. 

Juan Sánchez Mendoza

Ha ejercido el periodismo durante más de tres décadas, alcanzado premios estatales en dos ocasiones; autor del libro "68. Tiempo de hablar"(que refiere pormenores del memorable movimiento estudiantil); autor de ensayos literarios; y reportero de investigación de tiempo completo, acá en territorio nacional y más allá de nuestras fronteras y del continente americano.