Monterrey, Nuevo León, (Agencia Informativa de México). - La frustrante debilidad de la economía interna, la errática gobernanza, las elecciones y la incertidumbre, serán los principales obstáculos para el país en el primer semestre de 2021, advirtió Banco de México (Banxico).

Esta fue la postura de los analistas consultados por la institución en relación a los factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México en los próximos seis meses al inicio del siguiente año.

Los especialistas consideran que, a nivel general, los principales factores se asocian con las condiciones económicas internas, con un 46 por ciento, subrayó.

Refirió que otros de los factores que más pesan será el de la gobernanza, con un 26 por ciento y las condiciones externas con un15 por ciento.

A nivel particular, enfatizó, los principales factores son: la debilidad en el mercado interno, con 22 por ciento de las respuestas, y la incertidumbre sobre la situación económica interna, con 19 por ciento de las respuestas.

Igualmente, acoto, también impactarán negativamente la debilidad del mercado externo y la economía mundial, con 14 por ciento de las respuestas, y la incertidumbre política interna, con 11 por ciento de las respuestas.

También, continuo, afectarán duramente a México los problemas de inseguridad pública, con 7 por ciento de las respuestas, y la política de gasto público, con 7 por ciento de las respuestas.

Los especialistas consideraron que entre 2021 y 2022, se generarían unos 770 mil nuevos empleos en el país, pero seguiría el saldo rojo, ya que este año se habrán perdido más de 850 mil puestos de trabajo, debido a la pandemia

Previamente, el banco central había advertido que la economía del país seguirá marcada por la incertidumbre hasta el 2023, ante la fuerte contracción provocada por el golpe de COVID-19 en los sectores productivos.

“En cuanto a la economía mexicana, luego de la fuerte contracción de la actividad económica registrada en abril y mayo como resultado de la pandemia de COVID-19 y las medidas para hacerle frente, desde junio se ha recuperado como resultado de la reanudación de la actividad productiva en diversos sectores y de una reactivación de la demanda, especialmente la externa “, dijo.

Puntualizó que “no obstante, permanece por debajo de los niveles previos a la pandemia y persiste una marcada incertidumbre respecto de la evolución futura de la economía, toda vez que la pandemia sigue en curso y persisten restricciones sobre la operación de varias actividades “.

“Aún se desconocen las afectaciones más duraderas ocasionadas por la emergencia sanitaria, y existe el riesgo de rebrotes que impliquen mayores medidas de contención“, sentenció.