Ciudad de México. - Al rendir su Segundo Informe de Gobierno, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, destacó que el combate a la corrupción durante su mandato han permitido ahorros por 560 mil millones de pesos y el 1 de diciembre estarán listas las bases para la Cuarta Transformación. 

Aunque en su mensaje, López Obrador no mencionó las cifras de 64 mil 414 defunciones por el Covid-19, previo a la lectura del documento, se rindió un minuto de silencio por todas las víctimas mortales. 

En el patio central de Palacio Nacional, por espacio de 43 minutos y en presencia de integrantes de su gabinete e invitados especiales, el ejecutivo federal detalló avances y retos en su objetivo por “purificar la vida pública”. 

Reiteró que el principal problema de México es la corrupción, “por eso me he propuesto erradicarla por completo y estoy convencido de que en estos tiempos, más que en otros, transformar, es moralizar”. 

“Este gobierno no será recordado por corrupto, nuestro principal legado será purificar la vida pública de México y estamos avanzando, no hemos emprendido persecuciones facciosas, ni venganzas políticas, pero tampoco encubrimos a nadie, ni permitimos la impunidad, ya se acabó la robadera de los de arriba, pero todavía falta desterrar por completo el bandidaje oficial”, dijo. 

Señaló que la austeridad republicana es una realidad en su gobierno y todo lo que se ahorra es para el bienestar del pueblo. 

“Según cálculos oficiales, por no permitir la corrupción y por hacer un gobierno austero, hemos podido ahorrar durante nuestra administración alrededor de 560 mil millones de pesos, no es para presumir, pero en el peor momento contamos con el mejor gobierno”, presumió. 

Señaló que se enfrentan dos crisis, la sanitaria y la económica “y vamos saliendo adelante”; la pandemia, dijo, “no es un asunto político, sino de salud pública, por eso se ha confiado en profesionales”. 

Indicó que México participa en protocolos de biológicos contra el Covid-19 y la vacuna se tendrá para principios de 2020 de manera universal y gratuita. 

Resaltó que todos los apoyos federales se dan de manera directa, no se da dinero a organizaciones, ni se da preferencia a los bancos; un 70 por ciento de las familias recibe al menos un beneficio de los programas sociales, mientras que se otorgan 11 millones de becas para niños. 

López Obrador agradeció a paisanos migrantes los envíos de remesas, las cuales ascenderán a 40 mil millones de dólares a fines de año para 10 millones de familias. 

“Con el aumento de las remesas que envían nuestros paisanos desde Estados Unidos a sus familiares, con los programas de bienestar y los créditos que estamos otorgando a los de abajo, la pandemia no ha desembocado en hambruna ni en escasez de alimentos ni en asaltos y el pueblo de México tiene recursos para su consumo básico”, aseguró. 

“Pronostiqué que la crisis económica provocada por la pandemia sería transitoria; dije que será como una “V”, que caeríamos pero que saldríamos pronto; afortunadamente así está sucediendo; ya pasó lo peor y ahora vamos para arriba; ya se están recuperando los empleos perdidos, se está regresando poco a poco a la normalidad productiva y ya estamos empezando a crecer”, sostuvo. 

“En el mes de agosto, se crearon 93 mil nuevos empleos; el peso se apreció al cotizarse a menos de 22 pesos por dólar, luego de haber estado a más de 25; la mezcla mexicana del petróleo, de cero pasó a 40 dólares por barril; el consumo de productos básicos, en vez de reducirse con la pandemia, aumentó en 9.5 por ciento en términos reales, con relación al año pasado”, afirmó. 

A nivel mundial la economía cayó 10.4 por ciento, pero en México fue menor a lo que se está registrando en Italia, Francia, España y Reino Unido, se ha enfrentado pandemia sin contratar deuda adicional, mencionó. 

Había 20.5 millones de trabajadores en un millón de empresas, se perdió un millón, se mantuvieron 19.5 millones de empleos, dijo. 

En materia de seguridad, estableció que “ahora hay justicia para el pobre y en materia de seguridad ya no manda la delincuencia organizada, como era antes”. 

“Ya no hay torturas, desapariciones ni masacres; se respetan los derechos humanos y se castiga al culpable sea quien sea. Ya no hay en el gobierno federal funcionarios como García Luna”, abundó. 

Hacia el final de su mensaje reiteró que “sigue en pie el compromiso de terminar de sentar las bases del México del porvenir para el 1 de diciembre, cuando se cumplan dos años de gobierno”. 

“A partir de entonces, una vez que se tengan construidos los cimientos, sólo quedará la tarea de terminar la obra de transformación y seguir gobernando con rectitud y amor al pueblo para contar siempre con su respaldo”, enfatizó. 

Indicó que esta tarde, como lo establece la ley, Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación, entregará al Congreso de la Unión el Segundo Informe de Gobierno de su gestión.