Cancún, Q. Roo (Notimex).- La noche vivida este miércoles en el estadio Andrés Quintana Roo tuvo una mezcla de emociones en el público que se dio cita para presenciar el "Partido por la paz", que tuvo como gran protagonista al exfutbolista brasileño Ronaldinho, junto a jugadores históricos del fútbol mexicano.

La euforia e ilusión de los presentes antes del comienzo del encuentro, que estaba programado para las 19:00 horas (tiempo del centro de México) se tornó en molestia y reclamos por la demora de poco más de hora y media en el pitido inicial.

El sudamericano apareció para realizar calentamientos en el rectángulo de juego aproximadamente una hora con 20 minutos después de lo estipulado en el programa, sin embargo, los fanáticos se le entregaron en aplausos y ovaciones, pues sabían que el show se llevaría a cabo.

Una vez que dio marcha el choque entre "Amigos de Ronaldinho" y "Estrellas de México", todo contacto que producía "Dinho" con el esférico tenía como respuesta un aplauso desde las gradas.

A pesar de que el ritmo de juego fue, naturalmente, muy lento desde el arranque del partido, los goles comenzaron a caer mediante grandes acciones individuales y en conjunto, prueba de que la calidad perdura en los futbolistas, aunque ya no estén en activo.

Francisco "Kikín" Fonseca se presentó como otro de los grandes protagonistas de la noche; fue el más aplaudido y activo en el equipo de "Estrellas de México", y consiguió dos tantos de gran manufactura, uno con un potente derechazo y otro mediante un remate con la testa que clareó al examericanista Adrián Chávez.

Ronaldinho no quemó su rendimiento en carreras largas, pero se hizo presente en el marcador con dos goles, uno de ellos mediante una definición de "sombrerito", que hizo levantar de sus asientos al público, del cual algunas personas invadieron el campo en repetidas ocasiones.

"La sonrisa del futbol" se retiró del campo tras 50 minutos de actividad y, junto con él, parte de los fanáticos comenzó a abandonar el inmueble, que fue testigo de la victoria 8-4 por parte del conjunto capitaneado por el brasileño.