Santiago, (Notimex).- El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció este martes un bono de 125 dólares para 1.3 millones de familias vulnerables, un alivio con el que el gobierno busca suavizar el descontento social que desató a mediados de octubre las protestas.

"Enviaremos un proyecto de ley al Congreso que permite otorgar un bono que en promedio será de 100 mil pesos (125 dólares) por familia y que beneficiará a un millón 336 mil hogares", informó el mandatario en conferencia de prensa.

"Yo sé que los bonos no resuelven todos los problemas, pero también sé que significa un importante alivio, una ayuda, en un momento en que tantas familias chilenas lo necesitan", dijo.

En el marco de una actividad en la comuna de Maipú, explicó que estas medidas son importantes para poner en marcha la economía, que en octubre sufrió un duro golpe, con una contracción de 3.4 por ciento, de acuerdo con el Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec).

Piñera indicó que “la violencia, saqueos y la delincuencia le han dado un duro golpe a la economía chilena, y muy especialmente a la clase media y las pymes, pero estoy seguro que no vamos a poner de pie y superar esta situación”.

“El gobierno se ha esforzado para escuchar y atender las necesidades de la gente. (...) Esto complementa lo que ha sido la agenda social. Desde el primer día escuchamos con atención y con humildad lo que la gente quería", resaltó.

Piñera anunció el bono un día después de que su gobierno informara sobre un plan de reactivación de la economía por cinco mil 500 millones de dólares, tras el desplome del 3.4 por ciento de la actividad económica en octubre, el mes que estallaron las manifestaciones.

El plan busca principalmente generar 100 mil puestos de trabajo para enfrentar una esperada alza del desempleo por el cierre de cientos de locales comerciales después de ser incendiados, saqueados o destruidos.

Chile vive una tensión política y social desde las movilizaciones iniciadas el 14 de octubre contra un alza del precio del pasaje del Metro de Santiago, que días más tarde fue anulada por Piñera, sin embargo, las protestas prosiguieron abarcando otros reclamos sociales y tomaron un cariz mucho más intenso.