Tokio, (Notimex).- El secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, pidió hoy a Japón sumarse a la coalición naval en el estrecho de Ormuz para proteger el transporte marítimo por esa vía y contrarrestar las actividades de Irán, tras los ataques a petroleros, entre ellos un japonés.

“Cualquier país que tenga interés en la libertad de navegación y la libertad de comercio debe realmente considerar implicarse en este tipo de control del estrecho”, dijo Esper a la prensa en Tokio antes de reunirse con el primer ministro japonés, Shinzo Abe y su colega Takeshi Iwaya.

“Creo que es algo que los japoneses deberían considerar. Discutiré esto con ellos”, indicó el jefe del Pentágono, quien realiza su primer viaje al extranjero desde que asumió el cargo el mes pasado.

Iwaya evitó dar detalles sobre la conversación con Esper, si bien señaló que Japón estudiará la petición estadunidense teniendo en cuenta sus propios intereses estratégicos en la región del Pérsico, reportó la agencia japonesa de noticias Kyodo.

El mes pasado, el ministro de Defensa de Japón señaló, sin embargo, que no tenía planes de desplegar a miembros de las Fuerzas de Autodefensa en Medio Oriente para proteger barcos comerciales en la zona del estrecho de Ormuz.

La visita del jefe del Pentágono, quien aprovechó su gira por Oceanía y Asia para intentar obtener apoyo en torno a una coalición destinada a proteger la libre navegación en el Golfo Pérsico frente a la amenaza de Irán, coincide con el 74 aniversario del lanzamiento de las bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki.

Reino Unido propuso el pasado 22 de junio la formación de una misión marítima para proteger a los cargueros que transitan por el estrecho de Ormuz, por donde cruza una quinta parte del crudo mundial, pero aclaró que esta debía ser europea.

El ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas, ha rechazado que su país vaya a formar parte de una coalición liderada por Estados Unidos.

En junio anterior, dos petroleros, uno de ellos operado por una empresa japonesa, fueron atacados cerca del estrecho de Ormuz y la tensión se agravó después, cuando un dron militar estadunidense fue derribado en la región