México, (Notimex).- Aunque la esperanza de vida de los mexicanos es de 75 años de edad, el control de enfermedades como la diabetes o la obesidad permiten mantener o mejorar dicha expectativa, aseguró la endocrinóloga María Elena Sañudo.

En entrevista con Notimex, indicó que además de dar atención oportuna a los padecimientos que afectan la calidad de vida de las personas, es importante fomentar la cultura de la prevención mediante la adopción de hábitos alimenticios en la familia y la práctica de algún deporte.

La también diabetóloga recomiendo llevar una vida saludable, realizar ejercicio por lo menos cinco veces a la semana 30 minutos al día, se tenga o no diabetes u obesidad, así como llevar una alimentación balanceada que incluya proteínas y carbohidratos.

Refirió que los factores que determinan la expectativa de vida se dividen en modificables y no modificables, aunque en esta última, como la genética, hay casos de familias longevas, que viven por arriba de los 90 o 100 años.

En cuanto a las modificables, precisó que la salud, que es un factor de riesgo positivo, consiste en tener una dieta saludable y balanceada, hacer ejercicio de manera constante y mantener una cultura de la prevención.

Por otro lado, apuntó, los factores negativos en la expectativa de vida son los padecimientos crónico-degenerativos, que significa que "cuando nosotros padecemos cualquier tipo de enfermedades tenemos una disminución inherente de nuestra esperanza de vida".

Mencionó que una de estas enfermedades es la diabetes, que disminuye hasta 10 años la expectativa de vida de las personas que la padecen, pues se asocia también a complicaciones crónicas como ceguera, amputación de extremidades, infartos o embolias cerebrales o diálisis.

La gerente del área médico-marketing de diabetes en los laboratorios Sanofi expuso que la hipertensión, otra de las enfermedades crónico degenerativas más frecuentes, está asociada a 60 por ciento a los pacientes con diabetes, al igual que la obesidad.

Respecto a la obesidad, explicó que se trata de un factor totalmente modificable, pues con dieta o alimentación correcta y balanceada se puede reducir hasta 40 por ciento la posibiidad de tener diabetes, por ejemplo.

De acuerdo con la médico internista, en México 30 por ciento de la población padece de diabetes, con una edad promedio de 40 años, mientras que 70 por ciento de los mexicanos presenta obesidad y sobrepeso, lo que significa que 30 por ciento tiene obesidad y 40 por ciento sobrepeso.

La especialista indicó que debido a que cada día es más frecuente que la diabetes se presente en personas más jóvenes, en 2016 se decretó la alerta epidemiológica por esta enfermedad que afecta la esperanza de vida de la población.

En el caso de la obesidad, señaló que los niños entre cinco y seis años de edad que la padecen verán disminuida su esperanza de vida más allá de los 10 años, porque si un paciente desarrollara diabetes a las 15 o 17 años sólo vivirá unos 40 años más, apuntó.

De acuerdo con especialistas, la morbilidad temprana por obesidad afecta el desarrollo normal de los niños, a tal grado que se ha pronosticado que la actual generación de infantes con esta condición será la primera en la historia moderna que tendrá una esperanza de vida más corta.

María Elena Sañudo detalló que se ha observado que los estados de Veracruz, Nuevo León, Tamaulipas y Ciudad de México son lugares con mayor concentración de pacientes diabéticos, mientras que en Chiapas se registra el caso contrario.

Lo anterior se puede deber a que en las ciudades hay más pacientes con sobrepeso que es sitios rurales, aunque la prevalencia de la misma es casi igual, anotó.

Ante dichas circunstancias, la especialista recomendó llevar una vida saludable y realizar ejercicio unas cinco veces a la semana por media hora, sin importar si existe sobrepeso u obesidad.

También sugirió llevar una alimentación balanceada, que incluyan proteínas, carbohidratos, vegetales, frutas, leguminosas y lácteos, pero también asistir al médico o al nutriólogo de manera regular y revisarse de manera periódica para descartar problemas de sobrepeso.

"La cultura de la prevención también debe prevalecer y entender que nuestros hábitos comienzan por casa, saber que nuestros hijos están en riesgo de desarrollar estas enfermedades sino los alimentamos correctamente", finalizó.