Matamoros, Tamaulipas.- Un Pizcador de bombo que radicaba en el Ejido El Realito de la Ciudad de Matamoros, se suicidó colgándose de la rama de un árbol, lo que originó la movilización de las autoridades. 

El fallecido en vida respondía al nombre de Crescenciano Hernández, de 27 años de edad, quien vivía en el mencionado ejido en compañía de su mujer.

Fue ella quien lo identificó plenamente ante las autoridades, aunque el cuerpo fue localizado por algunos de los pizcadores que trabajaban con él, ya que estaba colgado en un árbol cerca del lugar donde trabajan.

Se dijo que el ahora fallecido estaba deprimido ya que en este día del padre, no pudo estar con su familia, ya que todos siguen en San Luis Potosí, de donde él es originario.

Comentarios de su mujer, indican que el domingo salió muy temprano de su casa y fue la última vez que lo vieron con vida.

La mujer se presentó en la Unidad General Investigadora para solicitar la devolución del cuerpo y así poder darle cristiana sepultura.


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