En estos días pasados vimos como en Reynosa Tamaulipas, el cabildo municipal no aprobó diversas propuestas provenientes de la administración municipal encabezada por la alcaldesa Maki Ortiz Domínguez, entre las cuales destacaba la adquisición de nuevos vehículos para la recolección de basura. Se dicen y cuentan varias versiones y dependiendo de los intereses que representa cada persona o grupo es como la platican. Algunos argumentan que el puesto le quedó grande a la alcaldesa, otros se nota que son guiados u obligados a seguir ciertas indicaciones superiores. Quizá no sea hasta ahorita una administración que se ha destacado por cabildear y/o mantener una sana convivencia entre los distintos actores políticos, funcionarios y sociedad civil pero lo que sí está claro, es que hay una clara intención de no apoyar o dificultarle la vida a la senadora con licencia.

“Lamentable y vergonzoso para todos”, “Somos un cabildo de vergüenza para la ciudad”   

Fueron algunos de los comentarios vertidos por ella al dirigirse a los demás integrantes del cabildo de Reynosa, los cuales sesionaban entre caras de seriedad, despreocupación y otros con exactamente poca vergüenza. Tristemente esto no es nuevo ni derivativo solo de aquella entidad, ya que en muchos municipios se tienen cabildos que bueno…. porque les cuento, si muchos ya saben o conocen este tipo de historias. Independientemente de si es justificada o no la postura de cada quien, es por demás visible que se actúa no con coherencia, decisión propia, análisis situacional exhausto, empatía ciudadana, no, se toman decisiones con base en otros factores pero no siempre pensando en el beneficio del colectivo ciudadano.

Para algunos no les gustará que sea una mujer quien lleve las riendas del municipio, cual misóginos con mentalidad anacrónica, otros simplemente siguen órdenes cual súbditos subyugados o en deuda y los demás, externan su desencanto contrariando todo de lo que ella provenga, esto hablando de aquellos que han mostrado una postura contraria, mediante sus acciones y toma de decisiones, dejando en claro que con ella simplemente no les interesa jalar parejo.

El otro lado de la moneda

El día de hoy me enteré de una muy agradable noticia. A una mujer por demás capaz, trabajadora, eficiente etc., entre otras tantas cualidades que posee, se le reconoce su esfuerzo brindándole una nueva oportunidad de seguir demostrando él porque más que merecidamente se le siguen abriendo puertas.

Hablando de mujeres, me congratula felicitar a la Ing. Patricia García Maldonado, externándole por esta vía, mi respeto, admiración y absoluto apoyo en su nueva encomienda.

Jorge Alonso Infante Alarcón  

Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.

Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)