Laredo, Texas.- El Puente Internacional Puerta a las Américas fue blindado durante cuatro horas por policías de todas las corporaciones locales, estatales y federales de Estados Unidos, ante una anunciada manifestación de cubanos residentes en Laredo.

Así como latinos y estadounidenses contra la cancelación de la Ley de Ajuste Cubano, conocida como “pies secos, pies mojados” (“wet foot dry foot”); los isleños todavía tienen la esperanza de que ocurra un milagro y logren el tan anhelado asilo en los EU.

Su objetivo sería respaldar a los más de 400 cubanos varados en Nuevo Laredo, según se dio a conocer mediante volantes con la leyenda “He will not divide. Come together in peace” (El no nos divide. Vengan todos en paz).

Por esa razón, un helicóptero de la Patrulla Fronteriza y las unidades especiales denominados centros de Mando, equipados con cámaras de video, del Departamento de Policía de Laredo y de la oficina del Sheriff del Condado de Webb, se apostaron en la entrada del cruce terrestre fronterizo que comunica con Nuevo Laredo, Tamaulipas.

Agentes con equipos antimotines, chalecos antibalas y hasta el grupo especial Swatt, mantuvieron una férrea vigilancia alrededor de cuatro horas en el Puente Internacional Puente a las Américas.

La manifestación estaba programada a las 11 de la mañana, pero conforme transcurrieron los minutos no hizo acto de presencia ningún cubano o integrantes de grupos Promigrante.

El sheriff, Martín Cuellar, dijo que se trataba de una medida preventiva ante cualquier disturbio, pero el reporte final fue el de “sin novedad”, por lo que el grueso de los oficiales se retiró del lugar y solamente quedaron algunos grupos de guardia.

El tránsito peatonal del lado mexicano al lado americano se realizó sin contratiempos, ya que fueron pocas las personas que cruzaron aún y cuando se vive en territorio mexicano el “puente de la Constitución”, es decir, un fin de semana largo de asueto.

En el lado mexicano, en la Plaza Benito Juárez, a una cuadra de distancia del puente, los centenares de cubanos permanecieron en calma y hasta ignoraron que en lado americano se realizaría una manifestación en su apoyo.

A eso de la una de la tarde inició el reparto de comida gratuita proporcionada por personas y organizaciones altruistas, también les fue distribuida ropa de invierno, puesto que el frío les ha afectado por no estar acostumbrados a temperaturas bajas.