San Andrés Cholula, Pue., (Notimex).- Disfrutar los momentos y valores familiares en México, más arraigados en el país que en Estados Unidos, es una lección para Eric Fisher, head coach de futbol americano de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).

“Mi familia, mis padres y hermano cada año vienen a Puebla a visitarme y mi relación con ellos, así lo siento, está mucho mejor que cuando yo vivía en Estados Unidos”, expuso.

En entrevista con Notimex, refirió que “yo me siento muy a gusto aquí, pero no niego que de vez en cuando hay quienes me ven blanco, rubio y escuchan mi acento e intentan provocar algo”.

A su memoria vino una anécdota que ocurrió hace 10 años cuando, el hombre originario de Kansas, Missouri, acudió al Estadio Azteca para apoyar a la Selección Mexicana de futbol soccer que entonces se enfrentó a la escuadra de la barra y las estrellas; encuentro que concluyó con un 2-1 a favor de México.

“Saliendo del estadio yo iba acompañado de mi novia, una hermosa mexicana, pero no faltó quién comenzó a gritarle malinchista porque vieron mi apariencia. Esa situación fue frustrante para mí porque yo me siento mexicano, vivo en México, trabajo por México y amo México, pero ante la gente me ven diferente y me juzgan”, insistió.

Fisher, quien nació en 1970, relató que después de los hechos ocurridos en las Torres Gemelas de Nueva York; el 11 de septiembre de 2001, él decidió alejarse de Estados Unidos para desarrollarse plenamente, por lo que vendió lo poco que tenía y emigró a España a los 31 años de edad lleno de ilusiones.

Estudió la licenciatura en Historia y Educación Secundaria en la Universidad de Avila College y el diplomado en Estudios Hispanos en la Universidad de Barcelona.

Durante dos años se empleó como entrenador de futbol americano en la NFL de Europa, específicamente en el equipo de Los Dragones de Barcelona, España, sin saber que en poco tiempo esa franquicia estaba por cerrarse, así que comenzó la búsqueda de un nuevo empleo.

Regresó a Estados Unidos pero con la esperanza de conocer otras naciones, hasta que llegó la oportunidad de trabajar en México, y sin pensarlo dos veces tomó el reto, al creer que sólo permanecería en tierras aztecas por un periodo de dos años.

Fue en el año 2004 cuando pisó suelo mexicano donde lo contrataron como entrenador en jefe y coordinador de deportes del Colegio Americano en la Ciudad de México, porque él aún seguía formando parte de la NFL de Europa.

“Comprobé lo que se dice, como la Ciudad de México no hay otra, y es una bestia con encanto propio, desde entonces comencé a querer mucho a México, tuve una novia mexicana por mucho tiempo y comencé a ver el programa de futbol americano de la UDLAP y fue cuando decidí quedarme”, manifestó.

Con un café expreso en su oficina, Fisher confesó que nunca se imaginó que permanecería tanto tiempo en Puebla donde ya son ocho años continuos de preparar a los jóvenes no sólo en el deporte, sino en ser mejores personas para contribuir a dejar un mundo mejor de cómo lo encontraron

México, dijo, es un país sumamente interesante. “Hay como una fascinación por los extranjeros y puedo decir que yo ya me siento mexicano, sentimiento que considero no podría registrar estando en otra nación, en otro lugar me seguiría sintiendo extranjero, pero en México no”.

También destacó la incomparable calidez humana de los mexicanos, “son muy respetuosos en comparación con la gente de Estados Unidos; destinan tiempo a lo verdaderamente importante como compartir los alimentos con la familia, de preparar una buena cena por el hecho de estar con ella, porque cuidan las relaciones interpersonales”.

“Cuando acudo por ejemplo a los museos, me gusta ver que hay gente de todos los estratos sociales gozando de los recintos culturales. Ver a los papás, que aun siendo muy humildes, les enseñan a sus hijos toda la riqueza cultural que ofrece, no sólo Puebla, sino en todo el país”, expuso.

Otro de los aspectos que han embrujado al entrenador es la gastronomía, “jamás pensé que iba a comer chapulines, y ahora los disfruto mucho con guacamole. Me gusta mucho la comida, me gustan las cosas picantes como las salsas, me gustan los tacos de sesos, la birria, y me declaro un gran fan de los vinos mexicanos”, reveló.

También recordó que en un periodo de tres semanas de vacaciones que tuvo, no perdió la oportunidad de conducir su auto desde Phoenix, Arizona, hasta Chiapas, lo que calificó como una gran oportunidad de conocer miles de paisaje, tanto que quedó flechado por las maravillas del estado sureño.

Por su formación Fisher desde su trinchera trabaja en egresar no sólo mejores deportistas, sino mejores seres humanos, ser mejores personas que tienen una conciencia social, que tienen la gran oportunidad de estudiar en una universidad de prestigio y que se van a enfrentar a un mundo competitivo.

“La gente que salga de acá (UDLAP) serán los futuros líderes de México y del mundo, entonces debemos de cambiar la mentalidad, pensando que debemos ser siempre más competitivos, no conformarnos. Tenemos que aprender a competir y ser honestos con nosotros mismos”, dijo, tras señalar que ese es su principal trabajo y probablemente su legado.

En ese sentido Fisher tiene muy presente en su memoria las palabras de George H. Allen, quien también fue entrenador en jefe en la NFL y que decía que él estaba haciendo hombres de sus jugadores de futbol americano, no jugadores de futbol americano de sus hombres.

“Estoy consciente que parte de mi labor de vida social; como un deber de cualquier ser humano, es trabajar por el bienestar de donde vives. En muchos aspectos yo me siento mexicano, pero también comprendo que hay diferencias culturales que están bien marcados, como el hecho que algunos mexicanos por mi apariencia me consideren ajeno a ellos”, refirió.

México ofrece un sinfín de riquezas culturales, variada gastronomía y hermosos paisajes entre otras riquezas, pero reconoce que aún se debe trabajar en erradicar la desorganización, la impuntualidad, falta de limpieza, el no prestar atención en los detalles, en cumplir los procesos y en cuidar los espacios comunes, porque al final las estructuras son para el bien de todos.

El entrenador en jefe agregó que hasta el momento no tiene planes de abandonar este país, pero si por cuestiones de trabajo tuviera que mover su residencia, “apuesta” que por lo menos una vez al año regresará a esta nación.

“No me he visualizado dejando a México, de hecho yo compré mi casa aquí en Puebla, no tengo ninguna propiedad en Estados Unidos, porque en México no sólo está mi casa, sino mi hogar con mi esposa”, resaltó.

Fisher se reconoce como un obsesionado de su trabajo y entre sus planes está mejorar el nivel competitivo de sus pupilos y posicionarlos en los mejores lugares no solo de México, sino del mundo, pues aún se siente “frustrado” por los logros alcanzados.

Desde que fue nombrado director deportivo del Departamento de Deportes de la UDLAP y head coach del equipo de futbol americano ha recibido el premio como Mejor Entrenador del Año (2009), logró el campeonato de la Conadeip en la temporada 2010.

En el 2011, Eric fue nombrado Head Coach de la Selección Nacional de la CONADEIP para enfrentarse al All-Stars Div. III de la NCAA tomando la victoria con un marcador de 45-27.

En el 2012, fue director de Escuelas Aztecas para después iniciar la temporada 2013 como Head Coach de los Aztecas de tiempo completo y obteniendo el campeonato nacional de la Conferencia Premier de la Conadeip en este mismo año.

Durante la temporada 2014, llevó a los Aztecas a obtener el tercer campeonato nacional de la Conferencia Premier, siendo nombrado el Head Coach del año de futbol americano de Conadeip en esta temporada.

En ese mismo año, dirigió a la selección mexicana en el Tazón de las Estrellas tomando su segunda victoria internacional en el Templo del Dolor.

Bajo la tutela del head coach, los Aztecas de la UDLAP tienen un récord de 9-0 victoria con tres campeonatos nacionales y un subcampeonato de la Conferencia Premier de la Conadeip.

Todo en su vida es futbol americano, pero confía que en un corto plazo concluirá su tesis de maestría en Antropología por la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), y retomará una de sus pasiones que es la práctica de yoga y meditación.

“Estoy muy agradecido con México, es un país que me ha tratado muy bien y creo que es una nación que me ha tratado mucho mejor de lo que yo la he tratado; me ha dado más de lo que yo le he dado a México así que es mi deber seguir trabajando aquí por México donde sigo aprendiendo muchas cosas”, expuso.