Reynosa, Tamaulipas.- Las "Marías" entraron a la modernidad pero siguen vendiendo sus artesanías como lo hacían sus madres o abuelas; con celular en mano y los audífonos bien instalados, Liliana, una "María" moderna, busca ganarse la vida vendiendo muñequitas hechas a mano.

Instalada en la peatonal Hidalgo, frente a un restaurante, la joven como cualquier otra revisa constantemente su celular, mientras se instala el audífono para seguir escuchando música.

Aseguró que lo más malo que le ha pasado en Reynosa es padecer el frío, pero eso no ha sido impedimento para salir a trabajar a lado de su abuela, que la mira de reojo constantemente sentada a un lado de ella.

La chica originaria de Querétaro ha dejado a un lado la falda larga y el rebozo, para dar paso a un leggins, cabello recogido, tenis y chaqueta.

Sin dejar de hacer la trenza a una muñeca la joven accedió a una entrevista para llamar a la gente a que compren los productos hechos en este país.

"La gente nada más viene a ver, queremos que nos compren, los precios son económicos, somos de Querétaro, yo apenas tengo 15 días aquí, acabo de llegar y las ventas están muy escasas, no hay nada, nada más mucho frío, la gente se acerca mucho y no compra, queremos que la gente venga vea y compre lo que nosotros hacemos allá".

En cuanto a los precios, Liliana comentó, "todo el año nos dedicamos a esto, a mí me enseñó mi mamá y aquí a un lado está mi abuela, tenemos precios desde 50 hasta 130 y hay unas muñequitas chicas en 15 pesos".

La entusiasta joven dejó de atender la plática porque había algunas personas esperando recibir información sobre las artesanías, que incluyen también algunas bolsitas, tipo monedero bordadas también a mano.