Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Los exámenes de evaluación y confianza podrían endurecerse pero sin flexibilizarse, aun con la demanda creciente de elementos de Seguridad Pública en el Estado, indicó el secretario ejecutivo del Sistema Estatal en el rubro, Armando Núñez Montelongo.

Dijo que las evaluaciones más rigurosas son las que se aplican a los aspirantes a integrar la unidad anti-secuestros, así como del personal que trabaja en las áreas de monitoreo del centro de evaluación y confianza (c-3), ya que 7 de cada 10 aspirantes reprueban las evaluaciones.

“Todo depende de los perfiles para la unidad anti secuestros, para trabajar en el área de monitoreo son más severas que las demás, para la unidad anti secuestro y para el propio secretariado de cada 10 pasan 3 o 4, para policías de cada 10 pasan 5”, expresó.

Explicó que la estadística ha mejorado en lo que se refiere a las evaluaciones de aspirantes a policías, de los cuales 5 de cada 10 reprobaban, pero con los filtros de exámenes toxicológicos, ahora 7 de cada 10 aspirantes son aptos a incorporarse a las filas de Seguridad Pública en Tamaulipas.

“Ahorita estamos mejorando ese promedio, porque antes de ser evaluados, de meterlos al C-3 al centro de evaluación de control y confianza, les hacemos un examen toxicológico previo lo que nos permite, de entrada si hay una persona adicta a una sustancia prohibida ni siquiera se pierde el tiempo en evaluarlo, porque no es merecedor de formar parte del cuerpo de auxilio de ninguna parte, con ese precepto ya traemos un promedio apto de 7 de cada 10 aspirantes”, señaló.

Núñez Montelongo aseguró que las evaluaciones no se podría flexibilizar para cubrir la demanda creciente de elementos de seguridad en la entidad, por el contrario podrían endurecerse, porque los estándares los rige el Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Recordó que el consejo nacional de Seguridad Pública es el órgano máximo en la materia y está conformado por el presidente de la República, el secretario de defensa de Marina, el titular del Cisen, el titular de la Policía Federal y del procurador general de la República, además de cada uno de los gobernadores del país.

“Los acuerdos que se toman ahí tienen carácter de ley y de ahí emanan esas reglas, de ahí encomiendan esos estándares al secretariado ejecutivo de seguridad pública nacional y de ahí nos bajan a todos los sistemas nacionales, las normas no las podemos mover, las podemos endurecer pero no flexibilizar”, puntualizó.