“El cambio climático es algo real, está sucediendo en estos momentos y es la amenaza más urgente a la que se enfrenta nuestra especie y tenemos que trabajar juntos para hacerle frente"
Leonardo Di Caprio
Fue el premio más esperado de la noche.
Leonardo Di Caprio, el “ya merito” de la entrega del Óscar, era el gran favorito tras llevarse el Globo de Oro y el Bafta por su interpretación de Hugh Glass en “El Renacido”.
Los pronósticos se cumplieron y vino lo inesperado.
Tras los agradecimientos, Di Caprio aprovechó la tribuna para externar su preocupación por el cambio climático.
El creciente nivel de emisiones de dióxido de carbono, la falta de interés en las energías renovables y el deshielo quedaron sepultados en una avalancha de memes y porras hacia el protagonista de Titanic.
Pero la preocupación de Leo no es broma, en cincuenta años la mitad de las especies en peligro estarán extintas, y la mitad de los bosques y selvas tropicales serían deforestados, enfrentando un futuro apocalíptico como el de Mad Max, la máxima ganadora de los premios de la Academia en su edición 2016.
El progresivo deshielo de las masas glaciares, fenómenos meteorológicos extremos, daños en las cosechas y, sobre todo, riesgos en nuestra salud están pasando factura ya a la especie humana que gusta de contaminar y depredar los espacios vitales, cada vez más escasos en la geografía mundial.
El futuro ya nos alcanzó y la urgencia de Leonardo di Caprio es legítima. Eso debe importar más que un Oscar.
@anibalmsilvamx