El benjamín sin ‘lana’

“Cuida los pequeños gastos. Un pequeño agujero…hunde un barco” Benjamín Franklin.

LO CLARO. La inversión en infraestructura pública, es fundamental en la dinámica económica de México.

Concretamente en Tamaulipas, en breve recuento, el mandatario estatal Egidio Torre Cantú hizo el recapitulado de las obras en vialidad, que se encuentran en ejecución y que darán la movilidad de mercancías y personas desde otros estados en su tránsito a los Estados Unidos y viceversa.

4 mil 055 millones de pesos en estructuras carreteras que conectan a Matamoros, Reynosa y Río Bravo; más la modernización de la rúa entre Tamaulipas y Nuevo León y la reestructuración de vías principales en el sur del estado.

Sumados a los 3 mil 400 mdp en inversión destinada a redes de agua –drenes pluviales y distritos de riego-.

El impulso a las economías domésticas, va sumado a la modernidad, en vistas de hacernos más productivos y atractivos a la inversión privada y la generación permanente de empleo.

LO CLAROSCURO. El ‘benjamín’ del sistema oficial (Benjamín, en hebreo, significa ‘hijo de mi dolor’ o coloquialmente, el más pequeño). Tal figura la encarna el poderoso secretario de la educación, Aurelio Nuño.

No sería un secreto bien guardado, que el ministro forma parte de las cartas a jugar, rumbo a la semi-lejana sucesión del 2018.

Su posicionamiento estelar en el ánimo del electorado, lo representa sin duda el encarrilamiento del modelo educativo, del que se habla mucho y se concreta lo que se puede.

Habría anunciado el ministro -tras la toma del poder de los educadores-, que haría un permanente acercamiento de él, con el sistema educativo en cada Estado; con cada mandatario de cada entidad, en la búsqueda de la implementación formal de las reformas educativas y del replanteamiento de la llamada ‘prueba enlace’ (la de PISA).

Y apegados al estricto criterio del anuncio que el benjamín habría enunciando en su recorrido por la geografía, lo ha cumplido.

Ha llamado a cuentas –a evaluación- a los docentes que se encuentran frente a grupo. También es, por todos lados, plausible.

El problema de fondo seguirá siendo (al menos en éste país)… el dinero.

El Plan Nacional para la Evaluación de los Aprendizajes, es la nueva Prueba PLANEA; que sustituye, recupera y enriquece las debilidades de la antes conocida prueba enlace.

Va dirigida únicamente a alumnos de sexto de primaria, de tercero de secundaria y de último grado de bachillerato. Una especie de monitoreo del alcance de los planes de estudio y la reingeniería en caso de desvío.

Pero…

5 mil 697 millones de pesos, será el recorte estimado a educación, según el Presupuesto de Egresos de la Federación PEF.

Silvia Schmelkes es la Presidenta de la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de Evaluación de la Educación INEE. Y en franca osadía, ha dicho claramente que no se cumplirá la estrategia del secretario, en el sentido de realizar la PLANEA cada dos años, por falta de presupuesto.

“Cuando se habla de eficiencia presupuestal, se habla de que lo hacemos así, no porque no tengamos dinero; sino porque es la mejor forma de gastarlo” aludió el secretario Nuño, al verse contradicho por Schmelkes, a quien no le vaticinamos jubilación en el encargo.

Se tambalea la posibilidad del benjamín de salir triunfante, con boleto en mano a los comicios… le falta ‘lana’.

Y Porfirio Díaz, fue enfático: “Un político pobre, es un pobre político”

COLOFON. Dijo Nuño “Politizar la educación, no le sirve a nadie, ya hemos vivido ésta etapa…” Elba Esther y Jongitud Barrios, opinarían lo contrario.

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