“La humanidad tiene una moral doble: una que predica y no practica y otra que practica y no predica” Bertrand Rusell. Premio Nobel Literatura 1950.
LO CLARO. En el tema rutinario, sobresale la inquietud manifiesta de la población y el paulatino fortalecimiento de las instituciones en el rubro de la seguridad.
La seguridad ya forma parte del ‘abecedario’ en la cultura de las nuevas generaciones. Que en esa formación cultural, consideran también de manera rutinaria las contingencias en los espacios públicos, quienes se encargan de la prevención de sucesos ‘gangsetriles’.
El combate a la inseguridad, forma parte principal de la agenda política de los contendientes a puestos de elección popular; de la agenda económica de las cámaras empresariales; de la familiar en la planeación de vida.
Y los resultados de la inversión en infraestructura y equipamiento, así como la presencia de las fuerzas del orden en los principales puntos de conflicto, avanzan un paso a la vez.
La inversión federal –en el caso de Tamaulipas- no es mayor que la que implementa de su propia bolsa en gobierno estatal. Pero deberá ser más considerable el recurso a sufragar en el presente ejercicio, no obstante los recortes que en la materia, tengan considerados los encargados de administrar el tesoro de la federación.
No es pregunta.
LO OSCURO. Objeción de conciencia.
Es un término jurídico al que aquellos que imparten justicia, acuden cuando se interpone en su emisión de veredicto, sus preceptos individuales que son capaces de contravenir precisamente al resultado de su juicio.
Es decir; si juzgan a alguien por que las creencias divinas del acusado le llevaron a cometer un delito y el juez, debe juzgar precisamente despegado de esas creencias. Pero en su individualidad el juez también tiene el mismo conflicto de fe, entonces es jurídicamente incapaz de emitir un fallo.
Perdone la torpeza interpretativa. Es un ejemplo burdo.
Cuando no atienden este precepto, diríamos que el conflicto de intereses le menguaría su ejercicio y estaría entonces, presentando una doble moral.
Bueno, en una mala comparativa, el presidente ejecutivo del máximo organismo ciudadanizado del país (INE), encargado de dar veracidad a la elección de cargos públicos federales, es el académico Lorenzo Córdova Vianello.
Y mientras por un lado, representa a TODOS los ciudadanos del país; por otro –en la intimidad de una llamada telefónica- vilipendia en su máxima expresión a un representante de un Consejo indígena de Guanajuato; de quien lo menos que pronunció en la ilegítima llamada filtrada, es que “parecía Toro Sentado” en referencia a su recortado español.
No dudamos de la probada capacidad académica y de su desempeño de funciones; su honorabilidad pública y que realmente el desenvolvimiento de su actuar, sea apegado a las necesidades de la institución.
Pero… ¿será que tenga doble moral?
A ese tipo de cuestionamientos, acude la población en general cuando estiman la veracidad de quienes nos gobiernan o de quienes nos pretenden gobernar.
Si acaso en público, defienden los valores familiares, de moral y buenas costumbres.
Pero en la privacidad unipersonal atienden preferentemente a los instintos y a la codicia.
Ya han dado excusas y defensa a la interpretación del presidente del INE. Será suficientemente válido, en el sentido que ha sido invadido su espacio de intimidad y no presenta relevancia al criterio interpretativo de su función.
Quizá el trasfondo sea político. Pero la duda permanece. ¿Cree efectivamente que los indígenas son otra raza distinta a la de él?
¿Podría darse entonces el caso, que otro indígena –como en su tiempo Juárez- contendiera a la máxima silla del país, se encontrara con un racismo tal, que el que juzga la elección, le anulara? Objeción de conciencia.
COLOFÓN: Lo más cierto, es que la moral es un árbol…que da moras.
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