- A redoblar esfuerzos convoca la UAT
1.- Son muy buenos los 10 puntos que presentó ayer el Presidente Enrique Peña Nieto, cuyo mensaje enviado con antelación hizo presuponer a quienes protagonizan movimientos de protesta violentos que se iba a instalar nuevas reglas para “legitimar” actos de represión contra ellos, pero no fue así.
La propuesta del Gobierno Federal es muy razonable, busca los causas legales e intenta rediseñar el ejercicio del poder acorde al nuevo marco de circunstancias, para lo cual precisa la creación de una ley que evite la infiltración del crimen y delincuencia organizada en los círculos de autoridad municipal, y lo hará a partir de la redefinición de la competencia de cada autoridad en el combate del delito y el presidente lo dijo muy claro: “Cuando la responsabilidad es de todos, no es de nadie”.
La medida es buena no sólo socialmente, además de lo que representa para el ciudadano común, es un instrumento legítimo para el gobierno, de acabar con el financiamiento a los movimientos irracionales de protesta cuyo verdadero fondo no es la solidaridad con las 43 familias que buscan a sus hijos.
El inconveniente de la estrategia presidencial es que, como todo ordenamiento legal será lenta su implementación, en otras palabras, tardará en obtener resultados, que es lo que está esperando el pueblo; mientras tanto la insurgencia, el anarquismo o como le quiera Usted llamar va a intensificarse, para demostrar que hay incompetencia en el gobierno, ese es su verdadero propósito porque el objetivo es lograr el poder a como dé lugar.
Asimismo, la iniciativa de Ley que enviará el Jefe del Ejecutivo al Congreso el lunes 1 de diciembre sustenta la creación de policías estatales “más confiables, profesionales y eficaces” que sustituyan a “más de mil 800 policías municipales débiles”. Dará prioridad a los estados de Guerrero, Michoacán, Jalisco y Tamaulipas para la instalación de ese modelo, y contempla sanciones para presidentes municipales y gobernadores que no cumplan.
Lo más positivo para los tamaulipecos de este pronunciamiento presidencial es que en la estrategia de “operativos especiales”, que comprende el despliegue de fuerzas federales en municipios clave, se incluye a nuestra entidad, al igual que en Guerrero, Michoacán y Jalisco.
Esta consideración es buena y es mala para Tamaulipas, buena porque siempre será mejor contar con esa expansión de fuerzas, nos da más confianza y seguridad; mala porque significa que estamos entre los primeros cuatro estados con cualidad de grave.
Cabe mencionar que a este evento celebrado en la ciudad de México asistieron todos los gobernadores, entre ellos el ingeniero Egidio Torre Cantú.
2.- En las inscripciones de agosto de este año, la Universidad Autónoma de Tamaulipas ofertará diversas nuevas disciplinas, así como programas académicos que tienen como base referencial la explotación del petróleo, de esta manera la Casa de Estudios asume de manera responsable con la demanda de los proyectos de desarrollo de Tamaulipas y del país.
Las acciones de formación de capital humano se enfocarán principalmente al nivel Técnico y de posgrado, por lo menos es lo que más urge a Tamaulipas para afrontar la demanda de empleo y de desarrollo de proyectos que se calcula vendrá con fuerza en un lapso de dos años aproximadamente.
Lo anterior surgió en el marco de la ceremonia del 40 aniversario de la creación del primer posgrado de la UAT, que fue la maestría en “Ingeniería Portuaria” de la Facultad de Ingeniería Civil en el campus Tampico-Madero. Ahí el rector Enrique Etienne Pérez del Río precisó entre otras cosas, la urgencia de certificar la mayor parte de los posgrados, en virtud de que sólo el 25 % de ellos está avalado por el CONACyT y en el caso de la zona sur, solamente la Facultad de Enfermería cuenta con la acreditación respectiva.
El rector Etienne fue más allá, al expresar que es menester, que todos los directores y sus respectivos equipos se pongan como meta el obtener en el espacio de los próximos 18 meses (año y medio) la acreditación para el 75 % de los posgrados que faltan de acreditación. Son 84 programas académicos en ese nivel de estudios y mínimo el 60 % deberán alcanzar el requisito.
La calidad de los programas y del personal académico no es algo que se logra de manera definitiva, tiene que mantenerse y someterse a evaluaciones periódicas para conserva el status. Lo que hoy puede ser acreditado, mañana corre el riesgo de perderse si no se realiza un esfuerzo continuo.
A ese compromiso responde la convocatoria del rector Enrique Etienne, que desde el inicio de su rectorado lo dejó claro, el nivel académico es la prioridad de la institución y estas acreditaciones son fundamentales para impartir educación de calidad.
