Ayer comentaba en mi columna de reflexión, sobre el binomio dual de migración y remesas, que se estima entre 350 mil y 500 mil paisanos tamaulipecos, los que viven legal e ilegalmente en los Estados Unidos y, a la vez envían remesas de dólares por mes, semestre o anualmente.
Citaba que son tamaulipecos radicados sobre todo en Houston, el estado de Georgia y diseminados en el resto del Valle de Texas, donde se concentra la mayor parte de migrantes originarios de nuestra entidad.
Por ello, afirmo que Tamaulipas ha adquirido un liderato entre las entidades del norte del país, como el estado que más migrantes tiene y más remesas se reciben de EUA. A la vez Tula, se identifica dentro del estado, como el municipio de mayor impacto en migrantes y remesas.
Al cierre del año 2015, Tamaulipas nuevamente se convertirá en el Estado que más crecimiento anual tiene de recepción de remesas de migrantes, al pasar de 830 millones de dólares recibidos en el año 2014, a un total de 840 millones en todo 2015 (calculo en base a cifras preliminares del Banco de México, diciembre 2015).
Con estas cifras, Tamaulipas remontó 12 lugares de los 32 estados receptores de remesas, ya que en el año 1995 ocupábamos el lugar 21º, pasamos al lugar 16º en 2010, y ahora ascendimos al lugar 9º con mayores montos de remesas, superando incluso a estados tradicionales como Zacatecas e Hidalgo.
México se convirtió en los últimos años en un país de migrantes y dependiente de la recepción de las remesas, que la migración contrae paralelamente. Al grado que hoy día las remesas son la primera fuente de entrada de divisas, superando ya a las divisas contraídas por la exportación del petróleo, que perdieron dinamismo, tanto por la caída de los precios internacionales como la baja de la plataforma petrolera (ayer el precio por barril llegó a solo 18 dólares).
El ingreso de México por remesas familiares registrará en 2015 un comportamiento favorable. Este año será mayor de 25 mil 083 millones de dólares. Ello permitirá que se mantenga como el tercer principal receptor de remesas en el mundo, luego de la India y China y seguido por Filipinas.
Las remesas en México, han crecido en forma exponencial desde el año 1990, donde se registró un monto de 2 mil 500 millones de dólares. El crecimiento progresivo continuó hasta el año 2007. Con un máximo histórico de recepción de más de 26 mil millones de dólares, al cierre del año 2014 estas pasaron a ser del orden de 23 mil 245 millones (Banco de México, 2015).
También los tamaulipecos ilegales o residentes remesan cada día más dinero a nuestro estado, enviando este año una cantidad record de dinero. El crecimiento exponencial registrado en la recepción de remesas en Tamaulipas, pasando en solo 20 años, de 47 millones de dólares en 1995, hasta 840 millones en 2015.
De acuerdo con indicadores económicos de la Balanza de Pagos que cada tres meses calcula el Banco Central, Tamaulipas aporta el 1.5% del total de dólares que llegan a México por este concepto, un porcentaje elevado entre los estados del norte del país y sólo igualado por Chihuahua (Banco de México, 2013).
Desde inicios del año 2000, los envíos de dinero a esta entidad crecen a tasas del 30% por encima de la media nacional que muestra incrementos a un ritmo de 20%. De forma tal, que en los años 2007, 2008, 2013, 2014 y 2015 se logran las mayores cifras registradas en este siglo para Tamaulipas, con 521, 511, 647, 830 y 840 millones de dólares, respectivamente.
En la mayor parte de los casos Tula es el municipio de donde más tamaulipecos parten hacia EUA y en consecuencia es la región donde más se reciben los beneficios de la remesas. Sin embargo, Tula forma parte de una de las regiones más pobres de Tamaulipas.
El monto de las remesas enviadas a México durante este año será de 25 mil 083 millones de dólares, la mayor cifra desde la crisis económica mundial de 2009, de acuerdo con estimaciones de instituciones financieras.
El cálculo, elaborado por el banco de inversión Goldman Sachs y la empresa de envío de remesas AirPak-Western Union con apoyo en estadísticas oficiales del Banxico, apuntó que el monto de remesas proyectado en México para 2015 será 6.0 por ciento mayor que la de 2014.
También el 2015, marcará el año con el mayor monto de remesas enviadas a todo Centroamérica, con un total de 15 mil 818 millones de dólares, lo que representa un crecimiento de casi siete por ciento respecto de 2014, según el análisis.
El análisis está en línea con estimaciones de economistas, que consideran que el mayor dinamismo en el mercado laboral de Estados Unidos y salarios más altos, están contribuyendo a aumentar los flujos migratorios y de remesas desde Centroamérica.
Alberto Ramos, director para América Latina del banco Goldman Sachs, explica que al mayor dinamismo económico en Estados Unidos se suma el factor cambiario, lo que significa que con la apreciación significativa del dólar respecto de otras divisas el impacto de las remesas es mucho más importante cuando se convierte a moneda local.
Las proyecciones indican que las remesas transferidas por los guatemaltecos en el exterior totalizarán este año seis mil 093 millones de dólares, o 9.9 por ciento más que en 2014. En Honduras, el salto anual es de 11 por ciento en 2015, para sumar tres mil 812 millones de dólares.
Mientras tanto, los recursos enviados por los nicaragüenses que trabajan en el exterior sumarán este año lo mil 191 millones de dólares, apenas por encima de la cifra de 2014; en tanto que en El Salvador estos flujos se mantendrán sin variación y en Costa Rica sufrirán un retroceso, según el análisis.
Por todo lo aquí citado, no nos queda más que reconocer que en México y Centroamérica, las remesas se convirtieron en fundamentales para mantener nuestras economías, lo que deja mucho que desear ante los resultados de las políticas públicas tan anunciadas a raíz de las recientes 12 reformas estructurales, donde no mencionan la importante contribución que hacen nuestros hermanos migrantes para que sus familias sobrevivan a la pobreza y marginación, que los orilló a emigrar y buscar empleos que en México no lograron satisfacer…
