Esta semana los mexicanos fuimos testigos, del “Golpe de Timón” urgente que finalmente decidió dar el gobierno mexicano a los integrantes de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) del estado de Oaxaca.
Así el 21 de julio se decidió que para el proceso de instrumentación de la reforma educativa, el gobierno de Oaxaca, con el respaldo del gobierno federal, desapareció el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), tras 22 años de ser el instrumento de la CNTE para financiar la extorsión pública en la entidad.
Como una muestra del abuso y poder que adquirió la CNTE, el año pasado ese organismo ejerció 22 mil 321 millones de pesos. Para 2015, tras la trasferencia de la responsabilidad del pago a la Federación, se estableció un presupuesto de 17 mil 778 millones de pesos, así que se esperaba que el gobierno estatal pusiera al menos cuatro mil 543 millones más. En los últimos 14 años el IEEPO ejerció recursos por 176 mil 550 millones de pesos.
Al quitar esa prerrogativa de manejo directo de los recursos a la CNTE se elimina la llave del poder del grupo de vividores que han tenido secuestrado al estado de Oaxaca, la niñez y juventud donde se tiene el mayor retraso en educación. Ese Golpe de Timón es parecido al llamado “Quinazo” que le quitó el poder al Sindicato Petrolero dominado por La Quina en Ciudad Madero. Igual que la desaparición de Luz y Fuerza del Centro que eliminó el poderío de los sindicalistas electricistas.
Por ello, igualmente en el caso de los concesionarios de gasolineras, como con algunos grupos de vividores de presupuestos públicos y sindicales, nos urge que el gobierno mexicano les aplique un auténtico “Golpe de Timón”, ya que tenemos muchos años sufriendo robos descarados de gran parte de los franquicitarios, que no dejan de vendernos cantidades menores de litros expendidos.
Más grave aún, saber que algunos concesionarios son los que venden gasolina de los ductos ordeñarnos a PEMEX, que en los últimos meses ya amenazó con el desabastecimiento de gran número de estaciones de gasolinas, por el exagerado robo de combustible en todo el país, y donde Tamaulipas ocupa el primer lugar nacional de robo en ductos.
El robo de gasolina junto a sus cómplices, ha logrado rebasar al delito de las drogas y secuestros como la mayor entrada de divisas a los integrantes del crimen organizado.
Ante esa evidencia, el 23 de mayo pasado, la PROFECO Y PEMEX realizaron un convenio para lograr retirar concesiones gasolineras. Así la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) y Petróleos Mexicanos (PEMEX) firmaron ese día un acuerdo para retirar los contratos de concesión a franquiciatarios que realicen prácticas ilícitas.
La titular de la PROFECO, Lorena Martínez, posteó que a partir de ahora "se trabajará con pasos más sólidos para proteger al consumidor", y se podrán tomar acciones concretas contra los franquiciatarios que infrinjan la ley.
En la firma del convenio, la funcionaria agradeció al director general de PEMEX, Emilio Lozoya Austin, su colaboración para trabajar de manera coordinada en esta labor. La funcionaria señaló que mediante esta acción con PEMEX "intercambiaremos información y se rescindirá la franquicia a quien infrinja la ley”.
Una muestra de estas prácticas ilegales de las gasolineras, que no obstante las amenazas de PROFECO y PEMEX, continúan con sus robos descarados, se dio ayer 22 de julio, al publicarse un Boletín por PROFECO que dice:
[…] En el primer semestre del año, la Procuraduría Federal del Consumidor inmovilizó 208 gasolineras por irregularidades y aplicó multas por más de 67 millones de pesos.
La institución precisó que dichas acciones representaron un incremento de 150% en relación con igual periodo de 2014. En un comunicado informó que de enero a junio de este año se atendió, a través de la Dirección General de Verificación de Combustibles, 884 denuncias de consumidores, lo que se tradujo en una verificación de 1,290 estaciones de servicios en el país.
Así como la aplicación de sanciones en 882 establecimientos por irregularidades a la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC). Destacó que durante el trabajo de verificación se registraron 168 negativas por parte de las gasolineras, lo que generó multas que van desde 250,000 pesos y pueden alcanzar los 3.5 millones de pesos.
La PROFECO subrayó que en el primer semestre del año realizó 1,290 acciones de verificación a estaciones de servicios, mientras que en el mismo periodo de 2014 llevó a cabo 567, lo que representó un incremento del 200% en esta actividad.
Respecto a las multas aplicadas, sostuvo que en lo que va del año superan ya 67 millones de pesos, cifra superior a las aplicadas en el primer semestre de 2014, cuando fue poco más de 42 millones de pesos […]
Pero en que nos beneficia a los mexicanos esas multas, que no nos son devueltas a los consumidores que son a los que realmente nos roban las gasolineras.
En México somos testigos como este caso, de muchos abusos que sufrimos los consumidores al realizar nuestras compras y ser asaltados literalmente, casos como el aquí citado de las gasolineras, así como el consumo de electricidad de la CFE, el uso de celulares donde diariamente se le roba al cliente en tarifas y otros servicios, el caso del agua, y muchos más negocios que asaltan al comprador que se encuentra indefenso.
Por eso es urgente ya auténticos “Golpes de Timón” para que los mexicanos nos sintamos protegidos por las autoridades, y no como hasta la fecha indefensos de los abusos de los monopolios que se ríen de las medidas de PROFECO y la CONDUSEF en el caso de los abusos que también nos propinan los Bancos en México.
Ya basta de abusos de criminales de cuello blanco, cuello gris y cuello negro, México requiere entrar al imperio de la Ley y respeto de los que día a día vivimos en paz y bajo el trabajo honesto y creador…
