Hoy es Domingo 05 de Mayo del 2024


Sección: Editoriales / Opinión Económica

La economía mexicana continúa dando altibajos

Por: Jorge Lera Mejía 06/04/2015 | Actualizada a las 22:00h
La Nota se ha leído 2491 Veces

De no ser por los ahorros forzados en las tarifas domésticas de energía eléctrica, los ajustes de tarifas de internet,  larga distancia y celulares y tendencia de homologación del salario mínimo, la economía mexicana sigue dando traspiés en un fenómeno actual de devaluación-inflación-recesión que impacta en la economía mexicana.

De hecho la SHCP ya ha aplicado dos ajustes a la baja del presupuesto de egresos de la Federación que ha afectado a las entidades locales (estados) y a importantes programas públicos tanto del sector agropecuario, industrial, comercial y de servicios. Así como al sector social (educación y salud).

Los datos macroeconómicos, nos hacen prever el panorama para la economía mexicana en lo que resta al año 2015; pues se espera aún una nueva burbuja inflacionaria (ahora se disparan los precios de productos básicos como el huevo, frutas y verduras), además continúa un peso más depreciado y un menor crecimiento económico.

El escenario macroeconómico del gobierno de Enrique Peña Nieto para este año consideró en un principio, el crecimiento de la economía del país del 3.7%, inflación del 3.0%, déficit presupuestario de 1.0% del Producto Interno Bruto (PIB), tasa de interés al fin del periodo de 3.5%. Sin embargo, ante las constantes caídas del precio del petróleo, los pronósticos son difíciles de concretarse (la nueva estimación se ajustó a menos del 3% de crecimiento esperado).

Son muchos los factores que están afectando negativamente, por lo que aquí podemos destacar los siguientes: 1) baja del precio del petróleo de exportación, 2) presiones al tipo de cambio del peso frente al dólar, 3) riesgos inflacionarios, 4)bajo crecimiento de economías como China, India y los países europeos, 5) violencia generalizada en varias regiones del país que inhibe la inversión, 6) posible sobre calentamiento de la economía de los Estados Unidos, 7) aumento de la deuda pública del gobierno, 8) endurecimiento de la política migratoria de los Estado Unidos, y 9) mercado doméstico interno débil.

Los ingresos petroleros son de gran importancia para las finanzas públicas del país, el año pasado éstos representaron el 7.4% del Producto Interno Bruto (PIB),  y significaron aproximadamente el 35% respecto a los ingresos totales del gobierno federal, lo que significa que de cada 10 pesos del gasto del presupuesto federal 3.50 pesos provinieron de  los ingresos de los hidrocarburos.

El peso mexicano ha sufrido una fuerte depreciación en su paridad cambiaria frente al dólar y el euro, lo que hace un inminente incremento de la inflación y pérdida de confianza de los inversionistas tanto nacionales como extranjeros, inclusive se empieza a comparar la situación actual con la del entorno que había en diciembre de 1994, cuando la divisa mexicana experimentó una severa devaluación.

La depreciación del peso frente al dólar, ocasiona que los productos importados ya sean terminados o como insumos para la producción, aumenten su precio en moneda nacional, lo que provoca que existan riesgos de aumento de costos para los productores y una mayor inflación, muy por encima del pronóstico del  gobierno federal para el 2015.

Una de las buenas noticias que nos alienta a los mexicanos, es que la economía de los Estados Unidos (principal socio comercial de México), se sigue recuperando; este aumento económico del vecino beneficia a nuestro país ya que aumenta la demanda de bienes y servicios de los mexicanos, se crean más fuentes de trabajo para los migrantes mexicanos, por lo que se incrementan las remesas, con lo que aumenta la captación de divisas y la capacidad de consumo de los beneficiarios de las remesas, que sigue siendo la segunda entrada de divisas.

La deuda pública del país ha aumentado considerablemente en los últimos años, el déficit se espera que suba al 3.5% del PIB. Por ello, la deuda real integral del país, se eleva a 42.2 con respecto al PIB en 2014 y a 43.3 en 2015, lo que significa que en dos años del gobierno de Enrique Peña Nieto, la deuda del país aumento, como porcentaje del PIB un 6.3%.

La mayoría Republicana en las dos cámaras de los Estados Unidos, obtenida en las elecciones del pasado mes de noviembre, alejaron las posibilidades de un acuerdo migratorio, que beneficiaría a los trabajadores de origen mexicano en ese país, y en cambio se está endureciendo más las políticas migratorias del vecino del norte.

Los factores positivos con los que sigue apostando la actual administración, para sobrellevar la economía en lo que resta del 2015, se siguen basando en que con la Reforma Energética, llegue una mayor inversión de acuerdo a la Ronda Uno, que podrían crear según estimaciones más de 150 mil empleos en los siguientes tres años.

Con la reforma en las telecomunicaciones, ya iniciaron a bajar las tarifas en telefonía, internet y televisión de paga. Las gasolinas, el diésel y el gas LP, desde el último aumento de enero de 2015, ya frenarán su desliz mensual a la alza de sus precios, lo que se espera que provoque menores riesgos inflacionarios, un gasto público en infraestructura productiva  que coadyuve a una mayor producción de las empresas y fortalezca el consumo interno.

Sin embargo, los beneficios de la Reforma Energética, no se verán en toda su magnitud el año entrante, esta apertura energética, se verán los resultados hasta el 2018 si bien nos va a los mexicanos.

Lo más grave está por venir en el año 2016, cuando ya no opere la cobertura de los precios del petróleo, y el ingreso público se vea nuevamente afectado por la tendencia de mediano plazo de mantenerse bajos los precios internacionales del petróleo.

El reto principal del gobierno de Peña Nieto sigue y seguirá siendo encontrar la ruta de incremento del PIB a tasas superiores del 5% anual, para vencer la inercia de los gobiernos de los últimos 20 años, que solamente han crecido a tasas promedio del 1.5 al 2% anual. Con esto el principal pasivo seguirá siendo el no cumplimiento de la meta de creación de más de un millón de empleos anuales y recuperar el poder adquisitivo.

Mientras que nuestro país no logre esto, seguiremos registrando tasas de pobreza superior al 50% de la Población y del 20% de pobreza extrema (Comentarios basados en datos publicados por Eduardo Esquivel en http://www.sdpnoticias.com/columnas/2014).

Jorge Alfredo Lera Mejía

Tampiqueño, Economista (ITAM), LAE, Maestro en Economía y Doctor en Administración Pública (UAT). Asociado del INAP, Subsecretario del Exterior de la Federación del Colegio Nacional de Economistas y Vicepresidente zona noreste de la LER. Inicia su carrera en 1977 y ha desempeñado diversos cargos en la Administración Pública Federal, en Michoacán y en Tamaulipas. Catedrático en la UNAM, ITAM, ULSA y actualmente profesor-investigador por la UAT e Instructor de la Auditoría Superior de la Federación.
adadasdas
HoyTamaulipas.net Derechos Reservados 2016
Tel: (834) 688-5326 y (834) 454-5577
Desde Estados Unidos marque: 01152 (834) 688-5326 y 01152 (834) 454-5577