Hay un programa en Reynosa que considero debería replicarse en toda la entidad y aun cuando parezcan porras a chaleco para el territorio de Pepe Elías, creo que la inercia negativa solo se puede combatir con una igual y más provechosa. Una inercia, un motor positivo que empiece por hablar bien de Tamaulipas.
Sumar lo negativo es sencillo y más cuando te conviertes en materia de lo estadístico. Les cuento enseguida la siguiente anécdota con la finalidad de que vean, como lo mejor de la entidad, sin lugar a dudas es su gente. Tras el asalto sufrido en la carretera Rumbo Nuevo, recibimos una severa dosis de impotencia que tenemos que canalizar. Dejar atrás pensar en la salida simple de que ya no hay retorno.
Que estamos fritos sociedad-gobierno y que nada de lo que hagamos nos va a alcanzar para mejorar el estadio de cosas que vivimos hoy. Vejados y maltrechos regresamos a la carretera con el temor – me decía mi auxiliar Alejandro Murrieta- de que regresaran, pues el tiempo virtual y relativo nos había encapsulado.
No pasaban coches, los trailers, como acostumbran, abriendo brecha irresponsables y no se iban aparar, pues pensar en qué hacían dos a bordo de carretera entre curvas, seguro no es como para hacer un alto.
Y sin embargo, fue un Transpaís de los que corren Palmillas Victoria el que se paró “sin ser parada”.
Nos vió matrechos y aceptó darnos un raid. Me senté a un lado de una viejecita que se conmovió al ver que la sangre aun escurría –poquita no es para tanto-. Tenga joven me ofreció su modesto celular. -Mi hijo lo paga y llame para que se reporte no vayan a estar con pendiente. Roto mi corazón por la sencillez de la señora, evité que se ofendiera e hice una llamada.
Más de cinco personas se acercaron, todos de economía modesta a brindarme sus servicios. Que si traía dinero, que si me ayudaban con algo para el pasaje pues pensaban que iba hasta Matamoros. Otros simplemente mentando madres, solidarios, pero igual y listos para pagar el pasaje. Se subió más adelante un supervisor de la empresa y la actitud fue la misma, ayudar a los dos en desgracia.
Ese es valor de Tamaulipas. Su gente y estamos ciertos que somos más los que estamos esperando mejores condiciones de vida. De Laredo donde Carlos Canturosas presume que este puerto fronterizo mantiene el liderazgo como la primera aduana de Latinoamérica, al incrementarse por este puerto fronterizo en el presente año el intercambio comercial entre México y Estados Unidos.
Así es mis amigos, también hay buenas noticias. En el Matamoros de Leticia Salazar habrá un puerto nuevo, en Reynosa sigue la avalancha de inversiones, más empresas, más empleos. En Victoria da gusto como cambia el rostro, otro hotel y la cafetería de mayor renombre internacional y de ello debe estar orgulloso el alcalde Alejandro Etienne, jefe de una comunidad amable donde ya este fin de semana estrenarán la remodelación de la Calle 8.
En El Mante con Pablo González hay charreadas y el bullicio está en las calles, en González Raúl García Vallejo presume de cercanía con todos y está al frente con el pico y la pala y ya de plano en El Sólido Sur, ahora sí que podemos decirle así, la tercia de Gustavo Torres Salinas, Esdras Romero y Armando López están en posición de privilegio.
No solo por la administración que encabezan si no por la llegada de las multimillonarias inversiones. La llamada zona más cosmopolita de la entidad tiene un importante futuro, el regreso de capitales y de empresarios que habían literalmente huido. Las inversiones no solo del área petroquímica si no del empresas que han visto que la región será en el mediano plazo a un territorio superior y confortable en todos los sentidos.
Y de eso, seguro que habrá apartado especial, cuando se trate de hablar del Cuarto Informe de Gobierno del ejecutivo Egidio Torre Cantú respecto del área de Mónica García González. No es apología, es sencillamente, como les digo, la falta que hace hablar también de lo bueno que somos, como humanos, como emprendedores y como ciudadanos de bien.
Y ya sabemos que la cobija de Miguel Ángel Osorio tiene muchos agujeros. Que no puede ni con el tema del Politécnico al que le entregó el cuerpecito. Que lo suyo no es el “palitos y bolitas prescolar y negociación”. Pero qué le vamos a hacer si el Manual de Organización no corresponde con su intelecto.
Pero como les digo. ¿Una más? Hoy no, pues me queda claro que muchos “predicadores”, somos como el PRD en tiempos de Salinas. Ni nos ven ni nos sienten, no en Polanco, no en la cantina la No.- 20, no Puerto Madero, no en Cambalache.
Y aun así, como hace falta hablar de lo bueno, de su gente, de lo que está bien, como sucede en Reynosa donde si Dios nos libra estaremos pendientes.
Abrazos fraternos…
18 pendientes…
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