Hoy es Viernes 26 de Abril del 2024


Sección: Editoriales / Golpe a golpe

Mensaje presidencial

Por: Juan Sánchez 02/09/2014 | Actualizada a las 09:27h
La Nota se ha leído 1526 Veces

Hoy, en Palacio Nacional, el presidente Enrique Peña Nieto ofrecerá un mensaje político con motivo de su segundo informe, que ayer entregó a la LXII Legislatura de la Cámara baja Miguel Ángel Osorio Chong, en su calidad de secretario de Gobernación.

También este día es necesario destacar la tersura con que se tratan  el jefe del Ejecutivo Federal y los diputados --de las siete fracciones que coinciden en el Palacio Legislativo de San Lázaro (aunque ellos aducen: hay excepciones)--, como bien lo confirma el rosario de reformas que, en tan sólo unos meses, se sacaron avante por recomendación del señor de Los Pinos.

En cuanto al contenido del documento entregado en la víspera –por Osorio Chong--, desde días antes la misma Presidencia de la República, a través de Internet, lo comenzó a divulgar en cápsulas, siendo que, por ley, debió remitirlo primero a las cámaras de Diputados y Senadores para su estudio y glosa. 

Usted bien puede comprobarlo al visitar la página electrónica de la Presidencia de la República –o quizá, como es mi caso y el de millones de compatriotas, abriendo el mail enviado por cercanos colaboradores del mexiquense--, donde aparecen algunos mensajes video grabados de Enrique con respecto a sus logros reformatorios del último año fiscal, en distintas materias. 

Por tanto este día, con temas plasmados en el segundo informe que tal vez aún ignoren los legisladores que forman parte del Congreso de la Unión --porque el período de sesiones ordinarias se abrió ayer y no creo que ya le hayan echado un vistazo al documento--, el mandatario podría hoy tratar de convencernos de su fecundo trabajo con videos difundidos a través de la Internet, aunque no sé si él o quienes lo asesoran desconozcan que mis hermanos obreros, campesinos, pescadores y subempleados, por referir a gran parte de la población mexicana, apenas si tienen para mal comer y menos cuentan con recursos para acceder a los mensajes vía electrónica. 

En fin, éste es el nuevo modelo para informar al pueblo por parte del Presidente de México. 

Así es que Usted ya lo sabe: se compra una computadora, contrata el servicio de Internet y toma cursos intensivos en la materia, o, de plano, no podrá gozar de los beneficios que conlleva enterarse del contenido del informe para bien entender el mensaje presidencial. 

La credibilidad

Si el presidente Enrique Peña Nieto en verdad quisiera recuperar algo de credibilidad, lo más sensato sería que hoy, ante el pueblo de México, aceptara los tropiezos cometidos en su ejercicio constitucional. 

Pero al señor de Los Pinos sólo parece interesarle persuadir a las cerca de mil 200 personas invitadas a escuchar su mensaje en Palacio Nacional.

¿No es cierto?

Formatos distintos

Años atrás, Usted lo recuerda, la entrega del documento informativo y el pronunciamiento del mensaje tenían lugar en un mismo recinto y en una misma ceremonia protocolaria, pero el formato cambió a partir de septiembre del 2007, porque Felipe Calderón Hinojosa no quiso visitar más el Palacio Legislativo de San Lázaro donde a la fuerza, el uno de diciembre del 2006, entró por la puerta trasera para rendir protesta como Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos. 

De entonces a la fecha el señor de Los ha rehusado que el salón de plenos de la Cámara baja sirva de locación a cualquier encuentro entre los poderes Ejecutivo (federal) y Legislativo, donde él mismo participe, sin con ello quebrantar la legalidad –nuestra Carta Magna consigna simplemente la entrega del informe por escrito y no la intervención personal del mandatario--, pero sí exhibe su falta de entendimiento con los diputados antagónicos al mandatario en turno y, sobre todo, carencia de urbanidad política. 

Dos de las ventajas que ofrecía el formato anterior, era que al evento acudían todos los integrantes de los tres poderes de la Unión y los dirigentes más representativos del corporativismo obrero, centrales campesinas, agrupaciones de profesionistas, empresarios e industriales; figuras del deporte, jefes de partidos políticos y, en síntesis, todo aquél actor que dentro de su actividad fuera considerado un cabecilla --no líder, pues para alcanzar tal connotación a la mayoría les faltaban tamaños--, y la difusión que se daba al evento a través de los medios de comunicación masiva, o bien por boca de los asistentes a éste, pues para acceder al recinto, a diferencia de hoy, no importaban credos, status social, colores ni ideologías. 

Dicho en otras palabras, era un ceremonial de respeto mutuo entre los representantes de los poderes Ejecutivo y Legislativo, aun cuando en el fondo no se soportaran. 

En esta ocasión, como ya es del dominio público, habrá dos eventos en torno a un mismo tema. 

El primero tuvo lugar ayer en el Palacio Legislativo de San Lázaro; y el otro será protagonizado hoy  en Palacio Nacional, donde el señor de Los Pinos pronunciará un mensaje ante sus invitados. 

Mar de promesas 

La oferta política de Enrique Peña Nieto, contra lo estimado por sus testaferros de mayor confianza, no ha quedado en el olvido para los cerca de 120 millones de mexicanos que una y otra vez lo escuchamos prometer que durante su régimen no habría crisis económica en el país…

Y menos, inseguridad. 

Así que quiéralo o no el señor de Los Pinos tendrá que hablar de los dos compromisos ante sus interlocutores, so pena de perder todavía más la credibilidad. 

He aquí algunas de sus ofertas hasta hoy incumplidas, por supuesto: 

a) Hacer crecer más del siete por ciento anual el Producto Interno Bruto (PIB); b) crear un millón 300 mil empleos anuales; c) crear un sistema nacional de becas y financiamiento para los estudiantes pobres; d) quitarle a Gobernación las funciones de la seguridad nacional; d) aumentar al doble el presupuesto para la educación, del cinco al ocho por ciento del PIB; e) distribuir a estados y municipios el 45 por ciento del presupuesto en lugar del cerca de 20% actual; f) la exención total de impuestos a toda empresa nueva que genere empleos; g) acotar el fuero para funcionarios federales; h) que los Centros de Readaptación Social sean verdaderas áreas de rehabilitación; i) que no exista déficit fiscal en el año 2010; j) inflación igual a la que registra la Unión Americana; k) una reforma fiscal a fondo para que la recaudación de impuestos crezca del 10 al 16 por ciento del PIB, sin que se sangre más a los contribuyentes pero sí incorporando a los evasores fiscales al sistema tributario; y l) procurar la seguridad pública y desterrar la delincuencia organizada. 

Para alcanzar las metas aquí enumeradas, se requería modificar preceptos constitucionales, que, por ley, sólo podría reformar el Congreso de la Unión, y para hacer posibles los cambios se necesitaba que la mayoría de los legisladores se pusieran de acuerdo. 

Eso ya fue zanjado con al menos una doce de reformas a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

¿Entonces lo que sigue?

Policías atracadores

Sobre la carretera Victoria-Reynosa hay una gasolinera --a la altura del ejido El Olivo--, donde elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) han dado en asaltar, literalmente, a los automovilistas que osan cruzarse en su camino a bordo de vehículos llamados “chocolates”.

El sábado que nos antecede fui testigo de cómo le robaron dos mil pesos a un conductor (quien viajaba en compañía de su pequeño hijo), a eso de las 9:30 horas, tras amenazarlo de que podrían remitirlo por los delitos de contrabando por no presentar los papeles de importación de la unidad, aun cuando exhibió el título original.

Metralleta en mano los uniformados lo acorralaron y despojaron del dinero, sin que la presencia de varios testigos les importara ni tampoco el rostro infantil que reflejaba terror –fue lo que más me impactó--, mientras el chófer suplicaba comprensión y demostraba ser un hombre de trabajo.

Se lo comento para que Usted, si es un automovilista con unidad sin regularizar, ande con muchísimo cuidado, pues los genízaros de la PFP ya empezaron a sacar las garras --como era de esperarse--, por su añeja costumbre de obtener dinero sin trabajar.

Ojalá este comentario sobre los policías atracadores llegue hasta el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; y el comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido, para que ordenen a sus subalternos marcarles un alto a los uniformados salteadores.

E-m@il:

jusam_gg@hotmail.com

Juan Sánchez Mendoza
Ha ejercido el periodismo durante más de tres décadas, alcanzado premios estatales en dos ocasiones; autor del libro "68. Tiempo de hablar"(que refiere pormenores del memorable movimiento estudiantil); autor de ensayos literarios; y reportero de investigación de tiempo completo, acá en territorio nacional y más allá de nuestras fronteras y del continente americano.
adadasdas
HoyTamaulipas.net Derechos Reservados 2016
Tel: (834) 688-5326 y (834) 454-5577
Desde Estados Unidos marque: 01152 (834) 688-5326 y 01152 (834) 454-5577