Este tema por desgracia, se ha puesto como nota de primera línea, tema de moda, a partir del reconocimiento del gobierno norteamericano de Barack Obama, que declaró hace una semana que el número de “niños no acompañados” que están cruzando la frontera, se presenta como una situación de crisis humanitaria.
Rescato las palabras que ayer 25 de junio declaró la Senadora Gabriela Cuevas, donde reconoce que: […] es indignante que esta calificación, digamos se la ponga, la administración que más deportaciones ha hecho en la historia de Estados Unidos, deportando más de 2 millones de personas.
Para que nos demos una idea de la política migratoria estadounidense, Estados Unidos gasta lo mismo en deportar migrantes que en capacitar a todos los profesores de primaria y secundaria de ese país, que son alrededor de 2.8 billones de dólares.
En los últimos cinco años más de 72 mil niños mexicanos han sido deportados de Estados Unidos, tres de cada cuatro de estos niños se encontraban solos, muchos de ellos se calcula que era 30 por ciento con menos de 11 años de edad.
Y esta problemática, no es solamente una problemática que están viviendo los niños centroamericanos, que sí, si tienen un porcentaje muy alto, pero que no podemos olvidar la responsabilidad que tiene el Estado mexicano de proteger a los niños que van migrando del Estado de México, de Guanajuato, de Jalisco, de Michoacán, de Puebla, de Zacatecas, un problema el de la migración que ha afectado pues ya no sólo a una generación de mexicanos […] (Fuente Senado de la República).
Hemos notado que a raíz del comentario de Obama, y de la publicación de fotografías, estas semanas, de lugares de retención de migrantes en la zona de Brownsville Texas, mostrando jaulas como las que se utilizan para los centros antirrábicos, donde se encuentran decenas de infantes mexicanos y centroamericanos hacinados en el suelo esperando ser repatriados a menos de 48 horas que son atrapados en la línea fronteriza.
Para ofrecer más datos duros del tema, ayer se reconocía por el gobierno norteamericano que: “Desde comienzos del año fiscal en octubre 2013, los agentes de la Patrulla Fronteriza han aprehendido a más de 52,000 niños inmigrantes que cruzaron solos la frontera. La mayoría proviene de Honduras, El Salvador y Guatemala, y son apresados en el Valle del Río Grande en Texas.
A la vez, el gobierno lidia con más de 39,000 adultos con niños sorprendidos cruzando ilegalmente la frontera. Un número desconocido de esos inmigrantes han sido dejados en libertad con la instrucción de que se reporten a las oficinas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) cercanas al lugar a donde se dirigen dentro de Estados Unidos…” (Fuente: La Voz de Arizona).
Por todo ello, yo me pregunto por qué tanto escándalo de los niños migrantes no acompañados que llegan hasta la frontera Mexicana, Texana o de Arizona. Nadie se pregunta qué pasa en el transcurso o trayecto de esos mismos niños por todo el territorio mexicano?
Esto significa que el problema es multifactorial y multicultural, debido a que primeramente:
1. Los niños salen de Centroamérica y de algunas regiones de México, motivado por la crisis económica, porque sus padres ya emigraron antes a EUA o porque son huérfanos de padre, madre o los dos padres.
2. Los niños emigran por no tener medio de vida ni manutención de estudios por lo que buscan en tercera generación el llamado “sueño americano” (american dream).
3. También se sabe que se aprovechan estas circunstancias para que los polleros o enganchadores, hagan negocio de trata de personas ante la indefensión de los infantes.
4. Otro factor es la falta de definición de las autoridades mexicanas migratorias sobre los derechos y obligaciones de los transmigrantes, que se les permite de forma invisible pasar desde el río Suchiate hasta el río Bravo, sin intervención oficial (ni los ven ni los escuchan).
5. Lo mismo sucede con la falta de definición del gobierno y Congreso Norteamericano respecto a la reforma Migratoria, que tiene lagunas legales respecto al trato de los niños migrantes y de los conocidos como “Dreamers” (estudiantes ilegales deportados de EUA).
6. Pero sobre todo, nadie reconoce que estos niños y emigrantes están huyendo de sus países, porque la violencia, miseria y desempleo ya no les permite mayor opción.
Finalmente, se plantea con mucha sencillez aquí, porque no se interviene entre las autoridades mexicanas, norteamericanas y centroamericanas, para detener esta fuerte emigración o salida de niños migrantes, desde el origen mismo, o en el cruce del río Suchiate, en lugar de esperar que los niños lleguen hasta la frontera México-Norteamericana, con los peligros y delitos que sufren esos niños al permitirse que crucen en el Tren ´La Bestia´, los caminos, pueblos y ciudades mexicanas, siendo amenazados y violentados tanto por autoridades, polleros, familiares y demás personajes que durante el trayecto o “vía crucis” tienen que sufrir.
Quién no ha sido testigo del trato que se les da a los inmigrantes en su trayecto a bordo de autobuses, trenes, caminos etc. por parte de algunas autoridades y criminales?
Este no es un tema menor, este es un tema de “Lesa Humanidad” que debe ser atendido con urgencia por las autoridades nacionales e internacionales, si nos debemos todavía a ser Seres Humanos capaces de sentir Indignación y Vergüenza por lo que les pase a los seres más indefensos del mundo….”Los Niños e Infantes de las regiones más pobres de América”.
