Altamira, Tamaulipas. - Un empleado del sector educativo que desde hace años se encontraba bajo tratamiento con medicamento controlado al sufrir diversos padecimientos, decidió escapar por la "puerta falsa" ingiriendo medicinas que acabaron con su vida, a pesar del esfuerzo del personal de Cruz Roja por salvarlo.

Las autoridades confirmaron el deceso del señor José Luis “A” de 47 años, quien según su esposa padecía desde hace 8 años trastorno obsesivo compulsivo y síndrome de Asperger narcisista y manipulador; y que ya en dos ocasiones anteriores había tratado de quitarse la vida.

La mujer explicó a elementos de la Fiscalía que ambos laboraban en el mismo plantel educativo, y que a ella se le hizo extraño que su pareja no llegara por la mañana como habitualmente lo hacía.

Ante esa situación decidió regresar a la casa en donde lo encontró semi-inconsciente, recostado en una cama junto a una mesita en la que había cajas de medicina vacías, por lo que pidió el apoyo de la Cruz Roja, cuyo personal trato de reanimarlo al tener leves signos de vida, pero por desgracia entró en paro cardíaco y expiró, siendo su cuerpo enviado al Servicio Médico Forense (Semefo) para la práctica de la necropsia de rigor.