Vamos a comentarle amable lector una historia de micro terror que está relacionada con una de las funciones sustantivas del INE; resulta que para renovar su credencial de elector, asumiendo que concluyó su vigencia, pasa usted las de Caín por absurdas disposiciones que aplica la institución modelo de la democracia mexicana.

Primero pone el INE un "plazo" para solicitar la renovación: que no exceda de dos meses su reclamo-solicitud. Si su credencial de elector venció en diciembre, por ejemplo, entonces tiene usted hasta el cinco de febrero para solicitar su nueva credencial y se la entregarán antes de la jornada electoral constitucional (para nuestro caso el cinco de junio de 2022).

Ahora que si usted solicita su renovación DESPUÉS del seis de febrero (recordemos que venció en diciembre anterior) entonces se la entregarán hasta después del cinco de junio, esto es no podrá concurrir a emitir su voto en tiempo y forma.

La argumentación del INE para dicha disposición, es que en mayo tiene que entregar el primer cierre del listado nominal y por tanto requiere de casi...¡¡¡TRES MESES!!! para realiza su cometido.

En consecuencia, es obvio que cierra los trámites correspondientes a principios de febrero del año electoral que corresponda.

Tanto que presume el INE de su eficiencia, pulcritud y rapidez que nos parece risible que para RENOVAR una credencial de elector de un ciudadano (a) que YA ESTÁ EN SU SISTEMA requiera tres meses para ello.

Pareciera que es el 100% del padrón electoral (90 millones de ciudadanos) el que se renueva cada año y por tanto requiere el INE de tres meses para su procesamiento; desde luego que no es así....¿qué porcentaje anual de ciudadanos (as) requieren la renovación de su credencial de elector?; ¿ cinco por ciento, diez por ciento, veinte por ciento?.

Por si el absurdo anterior no fuera suficiente, debemos agregar otro gran inconveniente para el ciudadano, cualquier ciudadano mexicano; todas las instituciones bancarias nacionales tienen firmado un convenio con el IFE primero y el INE después, mediante el cual SOLO aceptan como identificación oficial del ciudadano (a) la credencial de elector "con fotografía" VIGENTE.

Y así estamos en el país; por "detalles" como el anteriormente narrado es que, a veces, le damos la razón al señor presidente AMLO cuando acusa de pirruris e insensibles a los machauchones del INE.

Cuando les dice a los once integrantes del Consejo General del INE que mejor se pongan a trabajar en serio, para que corrijan las serias deficiencias de procedimientos; que salgan de su letargo burocrático y actualicen sus estrategias y equipamiento.

Suponemos que desde el Director General del Registro Federal de Electores del INE, pasando por sus Vocales Estatales hasta el más modesto de sus oficinistas, SABE de estos absurdos.

Desde luego nada pueden ellos cambiar; mientras los once integrantes del Consejo General del INE con capacidad de votar los acuerdos, no tienen ni idea de éstos tipos de problemas que cotidianamente enfrentan sus trabajadores del RFE.

¿Ve usted ahora porqué le llamamos el Instituto de la Necedad Electoral?.

Evaristo Benítez Castro

Nació en Llera Tamaulipas el 26 de junio de 1948. Estudió una licenciatura en la UAT, donde fue catedrático de 1972 a 1980.

Fundador de la revista de la UAT, llamada EDUCIEN, que se publicó desde el año de 1978 a 1981. Ha escrito su columna Faena en Canal en diferentes momentos desde 1991: La Verdad de Tamaulipas, Noticias del Golfo (ahora El Cinco), El Mercurio, El Diario de Ciudad Victoria y El Expreso, además de diferentes portales.

Consejero Electoral del IETAM en los años 2006-2007; autor de 14 libros del tema político-electoral.