Al revisar las fotografías difundidas ampliamente por el CDE del PRI tamaulipeco hoy por la mañana, en las que celebran el natalicio del inmolado candidato a gobernador Rodolfo Torre Cantú en sus oficinas de la capital victorense, sorprende la presencia central como invitado de honor, de César Augusto Verástegui Ostos, ahora pre-candidato coaligado del PAN-PRI -PRD a la primera magistratura, en el año 2022.

Presencia impensable todavía hace unos doce meses; los nuevos tiempos políticos nos llevan a ver con naturalidad (o al menos no con horror), que partidos antes adversarios a ultranza hoy mismo se unen transitoriamente para intentar arribar al poder por la vía electoral; incluso el partido en el poder federal y municipal, MORENA, aunque de manera hipócrita sataniza las coaliciones que les llama "antinatura", en la práctica política pierde el rubor para asociarse electoralmente con el PVEM, el PT e inclusive el PANAL, en las entidades donde éste tiene vida y habrá elecciones constitucionales.

Si bien el evento en comento lo preside Edgar Melhem Salinas como líder del CDE del PRI, en la práctica política es la presencia del pre-candidato CAVO lo que inscribe el evento como inédito e inclusive si se quiere hasta extraño.

No sobra insistir en que si MORENA sataniza tanto la coalición PAN-PRI-PRD en la elección tamaulipeca, ello se debe a que SABE que es en realidad competitiva y por tanto peligrosa.

La mejor muestra es la actual guerrilla de encuestas; la más fuera de proporción con la realidad, es una donde MORENA tiene el doble de la intención del voto a su favor sobre la coalición PAN-PRI-PRD.

Algunos observadores estimamos que hasta los más Morenistas más soñadores (pero inteligentes), sienten que esa ventaja de dos a uno de AVA sobre CAVO, es una quimera propagandística que intenta crear la percepción de ganador irremediable a AVA.

Pero no nos desviemos; le decía que los nuevos tiempos políticos, en el país y en cada entidad federativa, derivan en la realización de coaliciones partidistas antes impensables y por tanto irrealizables; intentar ganar una elección constitucional estatal provoca la pérdida de identidad partidista, en aras de obtener un triunfo a como de lugar.

Sin falsas posturas hipócritas la clase política tiene claro que ganar una elección de gobernador, bien vale olvidar odios ancestrales en los nuevos aliados partidistas; los nuevos tiempos político-electorales requieren de una mente abierta, analítica más que escrupulosa y sobre todo de piel gruesa: los agravios del pasado, su capacidad para olvidarlos, bien vale la pena a cambio de un triunfo electoral......salvo su mejor opinión desde luego.

Evaristo Benítez Castro

Nació en Llera Tamaulipas el 26 de junio de 1948. Estudió una licenciatura en la UAT, donde fue catedrático de 1972 a 1980.

Fundador de la revista de la UAT, llamada EDUCIEN, que se publicó desde el año de 1978 a 1981. Ha escrito su columna Faena en Canal en diferentes momentos desde 1991: La Verdad de Tamaulipas, Noticias del Golfo (ahora El Cinco), El Mercurio, El Diario de Ciudad Victoria y El Expreso, además de diferentes portales.

Consejero Electoral del IETAM en los años 2006-2007; autor de 14 libros del tema político-electoral.