Hoy es Jueves 18 de Abril del 2024


Reflexiones sobre el chayote

Por: Evaristo Benítez Castro El Día Miercoles 24 de Noviembre del 2021 a las 22:05

La Nota se ha leido 953 veces. 1 en este Día.

Para proceder como “universitarios” primero vamos a definir el significado del tema-título; dícese chayote al estipendio que  por  debajo del agua es recibido por un comunicador profesional; trátese de monero (caricaturista), reportero gráfico, reportero genérico, analista, comentarista, editorialista, directivo o en fin el trabajador de cualquier género involucrado en un medio informativo que tenga penetración social; dicho ingreso extraordinario y casi anónimo viene desde luego de la clase política o del empresariado nacional y podrá ser regular o eventual, dependiendo de los servicios prestados y del calibre del prestador.

Esta reflexión se me vino a la mente al recibir, ayer, una nota reenviada por un añejo amigo, Esteban Sánchez Nieto, donde involucran al nuevo grupo informativo Latinus, en supuestos tráficos de influencia pues un gobierno estatal  (que NO es de MORENA como esperaríamos  los mal pensados),  por medio de una de sus dependencias suscribió un “contrato” con Latinus,  por seis millones de pesos sin especificar cuáles serían los servicios prestados a cambio de dicha respetable suma.

Sin el ánimo de ser hipócrita pero es más que probable que en efecto se trate de una concepción moderna del chayote; todavía recuerdo aquella famosa lista que publicó Alberto Guerra Salazar en la primera plana de El Mercurio a principios de los noventas; desde  directivos hasta trabajadores de a pié de diferentes medios informativos de Tamaulipas (escritos, radiales y televisivos), fueron balconeados por René Avilés, Secretario de Información y Propaganda  del CDE del PRI, pues aparecieron sus nombres y  las respectivas cantidades de dinero que recibían por mes y año.

Al no tener El Mercurio ningún reclamo de los nombres balconeados en la entonces famosa lista de chayoteros, pues la clase política y el respetable en general la consideró buena y fundada; como también quedó claro que el entonces joven René no hizo más que seguir instrucciones del presidente del CDE del PRI en esa época, Oscar Luebbert Gutiérrez.

(Entiendo que todavía vive don Oscar en Reynosa Tamaulipas, por si algún hábil reportero quiere preguntarle sobre  cuales fueron sus motivaciones para la acción balconeadora en cita).

Esta pequeña reflexión histórica es prudente y conveniente para comparar el chayote de ayer con el de hoy; me parece que el Maestro en esta industria se llama Joaquín López Dóriga, pues recuerdo con nitidez como fue balconeado allá por los principios de éste siglo cuando en redes sociales se difundió la fotografía de un cheque a su nombre y firmado por el entonces gobernador de Veracruz por la cantidad de 450 mil pesos; la pregunta morbosa que se impuso fue...¿será esa cantidad por semana, por mes, por año, o es cantidad única?. No sobra agregar que el dueño de TELEVISA, donde trabajaba don Joaquín, seguramente se sorprendió de los alcances económicos de su colaborador, por lo que más adelante decidió prescindir de sus servicios.

Llegamos pues a hoy; no es de dudar que en efecto Latinus sea favorecido con el contrato turbio de marras; y decimos turbio si creemos en que SUPUESTAMENTE en dicho contrato no se especifican con claridad los servicios que Latinus prestaría a dicho gobierno estatal a cambio de los archi -mencionados seis millones de pesos.

La evolución del chayote, estipendio que morirá cuando muera el género humano, ni antes ni después, decimos la evolución del chayote tiene que ver con los mecanismos de rendición de cuentas de los entes públicos; Hacienda, contralorías federales, estatales y municipales, organismos de derecho a la información y un sin número de obstáculos tienen  que ser superados por la clase política en turno a efecto de no perder aliados del cuarto poder.

Cuando existe voluntad entre la clase política para entenderse con sus críticos (fundadas o no fundadas esas críticas)  las barreras geográficas son brincadas hasta por un venado cojo; cuando los políticos dicen que se acabó el chayote lo que quieren decir en verdad es que ahora existen distintas formas de acceder a él; las listas simples y llanas para recibir el estipendio, se han transformado en contratos sofisticados en los que, efectiva y desgraciadamente, sólo los tiburones pueden salir a pescar: los pescadores de a pié a comer charales.

Saludos ingeniero Esteban Sánchez Nieto.

Evaristo Benítez Castro

Nació en Llera Tamaulipas el 26 de junio de 1948. Estudió una licenciatura en la UAT, donde fue catedrático de 1972 a 1980.

Fundador de la revista de la UAT, llamada EDUCIEN, que se publicó desde el año de 1978 a 1981. Ha escrito su columna Faena en Canal en diferentes momentos desde 1991: La Verdad de Tamaulipas, Noticias del Golfo (ahora El Cinco), El Mercurio, El Diario de Ciudad Victoria y El Expreso, además de diferentes portales.

Consejero Electoral del IETAM en los años 2006-2007; autor de 14 libros del tema político-electoral.

DONA AHORA

Para que HOYTamaulipas siga ofreciendo información gratuita, te necesitamos. Te elegimos a TI. Contribuye con nosotros. DA CLIC AQUÍ


DEJA UN COMENTARIO

HoyTamaulipas.net Derechos Reservados 2016
Tel: (834) 688-5326 y (834) 454-5577
Desde Estados Unidos marque: 01152 (834) 688-5326 y 01152 (834) 454-5577