Cuando acude uno a la experiencia para evaluar la funcionalidad de un apoyo, se tiene una visión distinta de aquel capacitador que, carente de esa experiencia que dan los años, no les abre el abanico de posibilidades que se pueden manejar en un apoyo productivo, en este caso, el equipamiento para huertos de traspatio.

El diccionario de la RAE define huerto como terreno de corta extensión, generalmente cercado, en que se plantan verduras, legumbres y a veces árboles frutales; Podríamos agregar en esta definición, de acuerdo a los usos y costumbres de la población de México, la siembra de plantas medicinales o de ornato, y de acuerdo a las nuevas visiones de producción orgánica, aquellas plantas que funcionan como una barrera o control biológico contra plagas agrícolas.

Pues bien, el motivo de la columna es comentar lo que a veces observa uno en sus andares; Hemos encontrado a señoras que haciendo uso de la infraestructura para producción hortícola que el gobierno federal les entrega, en lugar de producir verduras que ayuden a mejorar su alimentación, siembran plantas de ornato; Quizá, como le comente a una señora, eso se debe a que tengan una mayor facilidad para producir plantas de ornato, que hortalizas.

Pero en lo personal, me parece una excelente alternativa, si, como les comente a las señoras, esas plantas de ornato se comercializan y no nada más sirven para decorar la casa. La cuestión aquí es producir, ya sea plantas de ornato que puedan ser comercializadas y con el fruto de esos ingresos, entonces mejorar su economía familiar y su alimentación.

Ahora bien, la visión del capacitador debe incluir de alguna manera la impartición de pláticas sobre cómo mejorar su alimentación a través de los frutos de su trabajo, en este caso, la obtención de huevo y de productos agrícolas. Es impresionante la cantidad de beneficiarias y de sus familiares, que presentan problemas de sobrepeso así como es sorprendente ver lo mismo en las colonias de difícil acceso como en los ejidos más apartados la presencia y venta de productos chatarra, que contribuyen a que seamos uno de los países con mayor incidencia de obesidad mórbida y diabetes.

Espero que así como se convoca a la aportación de ideas y proyectos para la construcción del Plan de Desarrollo Estatal, se incluya en este alguna propuesta que combine una mejora en la alimentación, el uso de las áreas deportivas que se encuentran subutilizadas en la periferia de la ciudad y la implementación de un programa escolar que prevenga en los niños la obesidad y les enseñe a ser productivos, y a tener  una mejor alimentación.

Paréntesis a la columna, tuve la oportunidad de escuchar al Señor Gobernador en la presentación de las reglas de operación de los programas federales 2017, dar un número telefónico celular donde, mediante mensaje recibido, promete estar al pendiente (y actuar en consecuencia) de los reportes que sobre seguridad realicen quienes nos dedicamos a estar en el campo desempeñando actividades productivas, de capacitación o de apoyo; Me parece una excelente medida, inédita, como muchas cosas que están pasando en este nuevo sexenio; Nada más espero que así como el Señor Gobernador brindo la confianza de dar su número telefónico, este acto no se convierta en filón de bromas y falsas alarmas, desvirtuando así la buena intención de quien está al frente de los destinos de los Tamaulipecos.

Porque la Visión para ser mejores debe incluir a todos los que conformamos la estructura de esta sociedad, desde la cabeza hasta los pies, para movernos todos como una unidad, en pos de una mejor condición de vida, aspiración máxima de la sociedad en su conjunto.

Sígueme en Facebook/Hablemos del Campo en Tamaulipas

Editorialista en HOYTamaulipas